Créditos a Stormy G.
A leer~
Capítullo
VI
El corazón de Jong Woon se aceleró cuando entró
a su oficina y vio a Kyu Hyun frente a la gran ventana de suelo a techo de su
oficina. Se veía abatido, sus hombros hundidos y su piel más pálida de lo
normal. Aún así seguía siendo lo más hermoso que Jong Woon hubiera visto.
Kyu Hyun necesitaba tiempo—tiempo para
acostumbrarse a la idea de que había sido reclamado—pero la espera casi mata a Jong
Woon. Afortunadamente, la espera había terminado. Kyu Hyun había regresado y él
nunca se iría de nuevo, si Jong Woon tenía algo que decir al respecto.
—No entiendo esta necesidad que tengo de estar
cerca de ti, Jong Woon. —Kyu Hyun habló tan suavemente, incluso con su oído superior
le había costado a Jong Woon oírlo. —Estoy confundido y asustado y quiero saber
por qué no puedo dejar de pensar en ti.
Jong Woon llegó detrás de él, dudando envolvió
sus brazos suavemente alrededor de Kyu Hyun y suavemente lo acercó hasta que el
hombre se apoyó en él. Se inclinó e inhaló el masculino olor de Kyu Hyun,
sintiéndose instantáneamente mareado.
—Eres mi Rajaaka —Jong Woon murmuró contra el
cuello de Kyu Hyun mientras frotaba su cara contra él. —Estas enlazado a mí por
siempre.
—¿S...soy un vampiro?
—No, Rajaaka. Tienes que nacer vampiro. No
puedes convertirte en uno.
—Pero tú eres un vampiro, ¿no es así?
—Sí. —Jong Woon no podía mentirle a Kyu Hyun,
aunque podía sentir el pequeño estremecimiento de temor recorrer el cuerpo del
hombre. —Soy un vampiro, pero nunca te lastimaría. Eres mi Rajaaka. Soy incapaz
de lastimarte.
—¿Qué significa…Rajaaka? —Kyu Hyun murmuró
mientras apoyaba su cabeza en el hombro de Jong Woon. —Sigues usando esa
palabra.
—Ya te dije, significa mío.
—Si pero… ¡oh dios!
Una mano de Jong Woon acariciaba el pecho de Kyu
Hyun y bajó hacia sus pantalones. Con un movimiento de su muñeca logró
empujarse bajo la pretina de los pantalones. No se sorprendió al encontrar un
pene duro como una roca. Siendo recientemente reclamado, Kyu Hyun sentiría la
necesidad de acoplarse con su pareja a menudo.
Jong Woon recorrió con su lengua la marca de la
mordida en el cuello de Kyu Hyun incluso mientras su mano envolvía el duro pene
del hombre y lo acariciaba suavemente. Él oyó a Kyu Hyun gemir, sintiendo
su temblor y su aguda respiración.
—Jong Woon, por favor.
—Petjya —Jong Woon corrigió, repitiendo las
palabras que le dijo la primera vez que estuvieron juntos. —Yo quiero oír que
digas Petjya.
—Yo necesito…Necesito saber…
—Sé qué necesitas, Rajaaka. —Jong Woon acarició
rápidamente el pene de Kyu Hyun. —Yo cuidaré de ti
Cuando Jong Woon lamió un lado del cuello de Kyu
Hyun, raspó con sus dientes suavemente la piel del hombre, Kyu Hyun parecía
derretirse en él. Jong Woon sabía que su brazo alrededor de la cintura de Kyu
Hyun era lo único que evitaba que cayera al suelo.
—¡Petjya! —Kyu Hyun gritó justo antes de que se
corriera. Un caliente chorro de esperma salió de su pene y cubrió la mano de
Jong Woon.
Al mismo tiempo, Jong Woon hundía sus colmillos
en la suave carne del cuello de Kyu Hyun; el dulce néctar del hombre llenó su
boca.
Jong Woon se sentía abrumado mientras retraía
sus colmillos. Él necesitaba. Le dolía. Su pene pulsaba. Él necesitaba tomarlo
de nuevo, sentir su pene hundirse dentro de la sedosa profundidad del hombre
hasta que no sintiera nada excepto a su Rajaaka.
—Manos en la ventana, Rajaaka —Jong Woon dijo con
sus dientes apretados. En el momento que Kyu Hyun se inclinó y apoyó sus manos
en el vidrio reforzado, Jong woon bajó los pantalones del hombre por sus
piernas.
Separó las piernas de Kyu Hyun y se arrodilló
detrás de él. El cuerpo de Kyu Hyun temblaba mientras Jong Woon separaba sus
nalgas. Jong Woon se inclinó y pasó su lengua por el arrugado agujero de Kyu
Hyun.
—Oh, ¡jódeme!
—Eso intento. —Jong Woon contestó antes de
aplicar una generosa dosis de saliva alrededor del agujero de Kyu Hyun. Él tendría
que recordar dejar tubos de lubricante en su oficina en el futuro. Pero ahora
tenía que cuidar de su Rajaaka. Hasta entonces tendría que aflojar a su
compañero de la manera antigua.
Jong Woon lamió y acarició y se empujó contra el
rosado agujero de Kyu Hyun. Él podía sentir las piernas de Kyu Hyun temblando.
Todo el cuerpo del hombre parecía vibrar con cada caricia de la lengua de Jong
Woon.
Los gritos de Kyu Hyun eran el cielo para los
oídos de Jong Woon. Él lo saboreaba, se envolvía en el dulce sonido sabiendo
que le daría a su Rajaaka un placer inimaginable El saber eso casi lo hace
venirse en sus pantalones.
De cualquier manera, Jong Woon no creía que
fuera a durar mucho. Su pene dolía tanto que realmente era doloroso. Se puso de
pie y vio alrededor del cuarto buscando algo que pudiera hacerlo más fácil. Se
arrancaría un brazo antes de causarle dolor a Kyu Hyun, incluso si era para
reclamarlo de nuevo.
Jong Woon vio una pequeña botella de loción
natural sin aroma en un estante cerca del escritorio. Recorrió el cuarto con su
velocidad sobrenatural y regresó con Kyu Hyun en menos de un segundo o dos. No
podía apartarse del lado de ese hombre, ahora que había regresado.
Vertiendo una buena cantidad de loción en su
pene, se lubricó y entonces esparció la restante cantidad en el apretado
agujero de Kyu Hyun, empujando sus dedos en el interior para asegurarse de que
estuviera lo suficientemente estirado
Jong Woon gruñó, una fuerte sensación lo llenó
cuando el cuerpo de Kyu Hyun lo chupaba como si necesitara ser llenado. Jong
Woon rápidamente sacó sus dedos y guió su pene dentro del culo de Kyu Hyun.
Un largo grito salió de los labios de Kyu Hyun
cuando Jong Woon se hundió hasta sus bolas, y Jong Woon repitió el sonido de
deseo con uno de los suyos.
—Joder, se siente tan bien, Rajaaka. —Jong Woon
gruñó mientras se empezaba a mover lentamente, entonces más y más rápido.
Él se aferró a las caderas de Kyu Hyun mientras
se empujaba dentro del apretado agujero del hombre. Los pequeños gritos de Kyu
Hyun se habían convertido en un largo sollozo. Jong Woon luchaba por respirar.
Todo el aire del cuarto parecía haber sido chupado.
—¡Petjya! —el cuerpo de Kyu Hyun se tensó.
Jong Woon gritó cuando los músculos internos de
Kyu Hyun aferraron su pene. El hombre llegó a su climax esparciendo crema
blanca perlada sobre el piso y la ventana.
Jong Woon disfrutó oír el antiguo término
cariñoso salir de los labios de su Rajaaka. Sabía que Kyu Hyun no entendía el
significado de esa palabra, el profundo significado detrás de eso, pero Jong
Woon si lo sabía.
Y el saberlo lo envió sobre el borde después que
Kyu Hyun. Trató de mantener sus garras retraídas mientras él se venía, pero
sintió la necesidad de hundirlas en las caderas de Kyu Hyun, mientras llenaba al
hombre con su semilla. La intensidad de su orgasmo hizo imposible que Jong Woon
se detuviera.
Jong Woon se arqueó sobre Kyu Hyun y sostuvo el
cuerpo del hombre cerca del suyo. Su corazón latía rápidamente dentro de su
pecho. Él podía sentir también el latido del corazón de Kyu Hyun, el pulso en
su cuello palpitaba mientras la sangre corría rápidamente por sus venas.
Jong Woon gruñó cuando su pene se suavizó y
salió del culo de Kyu Hyun. El olor de la sangre de Kyu Hyun, estaría impregnado
en él por siempre, Jong Woon cayó de rodillas y lamió las pequeñas marcas de sus
garras en las caderas de Kyu Hyun, su saliva cerró los pequeños cortes.
Su corazón dolía. Él había perdido el control y
lastimado a su Rajaaka. Solo un momento
antes le había prometido a Kyu Hyun que él nunca lo lastimaría y sin embargo
había hecho justo eso. Jong Woon podía solo orar porque Kyu Hyun lo perdonara y
no lo dejara.
Giró a Kyu Hyun, envolviendo sus brazos
alrededor de su cintura y enterró su cara en el abdomen de Kyu Hyun. —Por
favor, perdóname, Rajaaka. No tengo excusa por haberte lastimado. Perdí el
control yo…
—¿Perdiste el control? —Kyu Hyun se rió y
enterró sus manos en el oscuro cabello de Jong Woon. —Tendremos que tratar de
hacer eso más a menudo.
¿Qué? Seguramente él no había oído bien al
hombre. Él había enterrado sus garras en la piel de Kyu Hyun. Él lo había
lastimado. Kyu Hyun debía estar enojado con él. Quizás incluso decepcionado.
Jong Woon abrió los ojos y vio a Kyu Hyun. Él
estaba impactado al ver la sonrisa de satisfacción en los labios de Kyu Hyun.
El hombre se veía mucho más feliz que cuando acababa de llegar. Su piel
brillaba; las líneas de preocupación alrededor de los ojos se habían borrado.
—¿No estás enojado?
—¿Estás bromeando? Puedes joderme contra la
ventana cuando quieras.
Jong Woon sonrió y se puso de pie, envolviendo
en sus brazos a Kyu Hyun y abrazándolo fuerte, sin importarle que sus
pantalones estaban a la altura de sus tobillos y que Kyu Hyun no usaba nada.
—Te prometo que cuidaré de ti en el futuro,
Rajaaka —Jong Woon murmuró. —No dejaré que mi pérdida de control me gobierne de
nuevo.
—¿Eso significa que no me joderás contra la
ventana de nuevo?
—Te joderé contra la ventana, contra el
escritorio, contra la pared, contra lo que quieras —Jong Woon murmuró, su
corazón pulsaba de alegría. —Te joderé por todas partes y en cualquier lugar
que quieras.
Kyu Hyun levantó la cabeza para mirar a Jong
Woon, con el rostro repentinamente serio. —Primero necesitamos hablar.
Jong Woon asintió. Ellos deberían. Kyu Hyun
merecía saber cómo iba a cambiar su vida ahora que ellos se habían enlazado.
Jong Woon había querido explicarle eso a Kyu Hyun antes de que se fuera, pero
él sabía que Kyu Hyun necesitaba entender por qué ellos se pertenecían.
Ahora que ellos estaban enlazados separarse por
largos periodos de tiempo, les causaba dolor físico a ambos. Jong Woon
necesitaba la sangre de Kyu Hyun como Kyu Hyun necesitaba del semen de Jong
Woon. Esto era un intercambio de la esencia que da vida.
—Subamos al penthouse estaremos más cómodos
—dijo Jong Woon mientras se subía los pantalones y los abotonaba. — Podremos
hablar ahí.
Kyu Hyun asintió y se acomodó su propia ropa.
Jong Woon vio cómo pasaba su temblorosa mano por su cabello y miraba distraídamente
alrededor del cuarto. Kyu Hyun parecía desconectado, casi desorientado.
Pero se recuperó en un momento y envolvió su
brazo alrededor de él mientras era guiado hacia el elevador que los llevaría a
la suite en el penthouse. Ninguno de los dos habló mientras subían, el silencio
entre ellos era como una gruesa niebla.
En el momento en que las puertas se abrieron,
Kyu Hyun salió rápidamente como si no pudiera permanecer más tiempo en un
espacio cerrado. Él se frotó sus brazos rudamente con sus manos. Jong Woon
llegó detrás de él, y acarició los brazos de Kyu Hyun.
Kyu Hyun suspiró profundamente y se apoyó contra
él. —¿Por qué me siento de esta manera? —murmuró. Su voz temblaba con angustia.
—¿Qué está mal conmigo?
—Soy yo lo siento, Rajaaka —dijo Jong Woon. —No
sabía que el reclamarte sería tan difícil para ti. Desearía poder evitarte esto
pero no puedo renunciar a ti.
—Mi nombre es Kyu Hyun —bufó— ¡mi jodido nombre
es Kyu Hyun!
Jong Woon podía oír el malestar en la voz del
hombre y sabía que estaba a punto de quebrarse.
—Tu nombre es Cho Kyu Hyun. Tienes veintiséis
años. El nombre de tu madre es Kim Moksu. El nombre de tu padre era Cho Younghwan.
Él murió cuando eras un niño y tu madre se volvió a casar. —Kyu Hyun se giró y
vio a Jong Woon, su boca estaba abierta. Jong Woon siguió. —El nombre de tu
hermana es Ahra. Ella está casada con Park Jung Soo. Ellos están esperando a su
primer hijo.
—¿Cómo…?
—¿Creías que no te investigaría?
—Pero… ¿por qué?
—Eres mi Rajaaka. Quiero saber todo de ti.
Kyu Hyun empujó a Jong Woon y dio varios pasos
hacia atrás, manteniendo casi el cuarto entero entre ellos. Empezó a frotarse
los brazos y vio fijamente a Jong Woon.
—Sigues llamándome de esa forma —dijo Kyu Hyun.
—Quiero saber qué significa, y no me vengas con alguna medio preparada tonta
explicación esta vez. Quiero la verdad.
—Rajaaka significa amante, pareja, um...
consorte. Te reclamé mientras teníamos sexo y somos una pareja enlazada.
—¿Pareja enlazada? ¿Reclamar? —Kyu Hyun
preguntó. Él se veía aturdido. —¿Qué quiere decir eso? Nosotros solo tuvimos
sexo ¿Cómo puedes reclamarme solo con sexo? Eres un vampiro. Estoy seguro que
has tenido sexo con cientos de personas. ¿Los tipos como tú no viven por
siempre o algo así?
Jong Woon sonrió, divertido por las suposiciones
de Kyu Hyun, que eran como la de la mayoría de la gente. —He tenido sexo con
mucha gente, eso es cierto. Y he vivido mucho tiempo, de hecho, cientos de
años.
—¿Qué edad tienes?
—Nací en 1367.
Kyu Hyun abrió más los ojos. —Amigo, hablando de
asaltar cunas.
—He visto muchas cosas en mi vida y he tenido
muchos amantes, pero nunca he tenido un Rajaaka antes. Solo se tiene uno y he
esperado toda mi vida por ti. —Jong Woon tomó una profunda respiración, el olor
de Kyu Hyun le llegó incluso desde el otro lado del cuarto. —Ahora que te he
encontrado. Nunca estaré solo de nuevo.
Kyu Hyun abrió la boca como si fuera a decir
algo y entonces la cerró de nuevo. Jong Woon podía sentir la fuerza de su
mirada. Los dorados ojos de Kyu Hyun tenían una sombra de curiosidad y de
confusión y quizás un tinte de tristeza.
—¿Estabas solo? ¿Por qué? No puedo ni pensar en
que el gran Kim Jong Woon no tenga a gente lanzándosele a sus pies.
—Eso es cierto, pero ninguno de ellos eres tú. —Jong
Woon abrió la boca para decirle a Kyu hyun que había un inconveniente de todo
esto, pero cambió de opinión. El hombre tenía suficiente a qué acostumbrarse
por ahora. Él lentamente se acercó a Kyu hyun, un paso a la vez, hasta que él
estuvo a la distancia de sus brazos.
—¿Quieres decir, que ninguno de ellos era tu
Rajaaka?
—Exactamente. —Jong Woon acarició la mejilla de
Kyu Hyun, la alegría lo llenó cuando Kyu Hyun se apoyó hacia la suave caricia.
—Ninguno de ellos eres tú.
—¿Por qué yo? —Kyu Hyun preguntó. —¿Qué hay tan
especial en mí?
—Tú me llamaste desde la primera vez que olí tu
sangre; Esa es la manera en que es para los de mi tipo.
Kyu Hyun tragó con fuerza. —¿Quieres decir que
tu beberás mi sangre?
—Ya bebí tu sangre —dijo Jong Woon mientras sus
dedos bajaban por el cuello de Kyu Hyun y tocaban los pequeños puntos marcados
en su cuello. —Y voy a beber de ti de nuevo.
Ahora que estamos enlazados, unas cuantas gotas
de tu sangre puede mantenerme más que cualquier otra sangre que pueda beber.
—¿Pu-puedes lastimarme? —Kyu Hyun murmuró.
—¿Te he lastimado antes?
—No recuerdo que tomaras mi sangre antes. Solo
sé que lo has hecho. Vi las marcas en mi cuello. —Repentinamente Kyu Hyun vio
fijamente a Jong Woon. —Tomas mi sangre durante el sexo, ¿no es así?
—Así es. Es muy erótico para mi tipo beber
sangre durante el sexo. Incrementa las sensaciones en ambos, en mí y en mi
pareja, aumenta nuestra sensibilidad y el placer que nos damos el uno al otro.
—¿Continuarás tomando mi sangre cuando tengamos
sexo?
—Si tú me lo permites. —Jong Woon frotó su
pulgar sobre el pulso en el cuello de Kyu Hyun. —Puedo tomar tu sangre sin sexo,
si lo prefieres. — Jong Woon haría cualquier cosa que hiciera a Kyu Hyun
sentirse cómodo, pero él esperaba que el sexo fuera parte de eso.
—¿Me dolerá si tomas mi sangre cuando no estemos
teniendo sexo?
—No.
—¿Por qué no?
—Tú eres mi Rajaaka —dijo Jong Woon. —Tú solo
sentirás placer ante mi toque. Es por eso que tus brazos hormiguean y tu cuerpo
duele. Me necesitas tanto como yo te necesito.
—No entiendo.
—Yo me comprometí a amarte y serte fiel. Te
ofrecí mi vida y mi sangre. Yo seré tu noche como tú serás mi día. Me quedaré
por siempre contigo, mi amor, mi Rajaaka. Me comprometí con los votos por toda
la eternidad. Para el mundo, seremos una sola alma. — Jong Woon tomó el mentón
de Kyu Hyun y lo inclinó hacia arriba para mirar fijamente al hombre. —Esas son
más que solo palabras antiguas para mi tipo. Esas palabras nos unen. Tú
necesitas entregarte a mí, tanto como yo necesito tomarte.
—Compartí mi esencia contigo, como tú lo hiciste
conmigo. Al darme tu sangre tú me das vida. Y yo te doy vida a cambio cada vez
que te hago el amor y tu cuerpo acepta mi semen. Eso prolonga tu vida y la
iguala con la mía.
Los ojos de Kyu Hyun se abrieron más y entonces
soltó una carcajada. —Entonces, si digo ‘no esta noche, querido, tengo dolor de
cabeza’ ¿podría matarme?
—No, tú no puedes morir si no aceptas mi esencia
pero tu ciclo de vida lentamente regresará a la de un ser humano normal hasta
tu muerte. —Jong Woon gimió ante ese pensamiento. Él no quería pasar los
siguientes cientos de años sin su Rajaaka.
—Háblame del resto de esto.
Jong Woon se aclaró la garganta y continúo. —No
puedo salir a la luz del día. Eso podría matarme. Tú eres mi luz del día y yo
seré tu noche. Eso significa que tú me brindarás calma y paz mientras que yo te
daré fuerza y poder.
Kyu Hyun frunció el ceño. —¿Seré tan fuerte como
tú?
—Y rápido —dijo Jong Woon. —No tendrás todas mis
características pero si muchas de ellas. Serás más fuerte y rápido y serás
capaz de resistir mucho más que antes.
—¿Y a cambio?
—Tú me darás paz, como te dije. —Jong Woon
retiró el cabello castaño de la cara de Kyu Hyun. —Como vampiro, puedo perder
el control si me enojo o me lastimo. Tú me darás la calma que me ayudará a
mantener el control. Tú evitarás que lastime a alguien.
—¿Eso fue lo que sucedió la noche en que nos
conocimos?
—No. —Jong Woon negó con la cabeza. —Cuando tú
te cortaste con la hoja de tu currículo, la hoja se embebió de tu sangre y tu
olor. Tu olor me causó una oleada de lujuria que solo se calmó cuando bebí tu
sangre y se inició el lazo entre nosotros.
—¿Qué acerca del resto de esto? —Kyu Hyun
preguntó. —¿Algo acerca de la eternidad y del mundo?
—Me comprometí contigo por toda la eternidad. Tú
eres el único en mi vida, Rajaaka, para toda la eternidad.
—¿En serio? —Las cejas de Kyu Hyun subieron casi
hasta la línea del cabello.
—Si, me comprometí contigo. Nunca tendré a otro,
nunca amaré a otro. Tú serás mi Rajaaka hasta mi último aliento. Me quedaré
contigo por siempre.
Kyu Hyun sonrió. —Cool.
Jong Woon se rio. —Para el mundo seremos una
sola alma. Esas son las últimas palabras del reclamo. Eso significa que
nuestras almas se fusionaron. Yo estoy dentro de ti y ti estas dentro de mí,
aquí…
Jong Woon tocó con sus dedos el corazón de Kyu
Hyun y luego la sien de Kyu Hyun. Y aquí,
terminó telepáticamente.
—Jong-Jong Woon. —Kyu Hyun palideció. —Tu…tu…
Puedo
leer tu mente como tú puedes leer la mía, Jong Woon
contestó en silencio. Esto hace parte de
la fusión de nuestras almas.
¿Puedes
leer mi mente?
Jong Woon estaba feliz de oír a Kyu Hyun en su
cabeza. Sus ojos ardían a causa de las lágrimas—algo que él no había
experimentado en cien años. Inhaló profundamente, tomando el aroma de Kyu Hyun.
Calmándose inmediatamente, como Jong Woon sabía que ocurriría.
—Puedo oír cuando me hablas pero tus
pensamientos son tuyos. Tienes realmente que proyectarlos hacia mí para que yo
pueda oírlos.
Kyu Hyun parecía aliviado. A pesar de que Jong
Woon deseaba que Kyu Hyun no quisiera esconderle nada de él, lo comprendía.
Nadie quiere que otros lean tus pensamientos, ni siquiera tu pareja enlazada.
—Hablar de esa manera es muy íntimo, Rajaaka
—Jong Woon siguió. —Puedes oírme y yo puedo oírte, pero solo a ti. Esto es algo
reservado para las parejas enlazadas.
—¿Podrás oírme siempre que lo proyecte hacia ti?
—Sí.
Continuará~