Mostrando entradas con la etiqueta #One-shot. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta #One-shot. Mostrar todas las entradas

jueves, agosto 08, 2013

No es Kyuhyun [+18]



[Incluí un género nuevo, pero no lo diré porque quiero que sea sorpresa; incluye lemon sé que lo leerán perversotas]

—Es un asunto importante –Casi parecía una súplica-
¿Qué sucede?
Es muy delicado como para decirlo por teléfono… Solo ven rápido ¿Quieres?
En cuanto resuelva algunos asuntos en la empresa iré, bueno me tengo que ir… Cuídate, te amo
—Yo también –Se ruborizo, era increíble como estando lejos de él podía provocar esas reacciones en él-

Colgó el teléfono, dio un gran suspiro mientras se dejaba caer al sillón más cercano de la sala, bueno por lo menos estaba menos nervioso que al principio pero aun así saber aquello le inquietaba demasiado.

¿Por qué justamente él? ¿Por qué ahora? Hubiera preferido esperar un poco más… Tal vez dentro de 5 o 6 años más, pero ¿Justo ahora? Cuando su vida de casado iba tan bien, son felices siendo ellos dos, pero ¿uno más?...

No, aun no podía asimilar lo dicho por aquel doctor, su condición no podía ser eso, hubiera preferido que el doctor que le atendió tenga antecedentes de demencia así por lo menos justificar que estuvo en un error, pero no el desgraciado teniendo sesenta años seguía bien lucido, por algo no es el doctor de la familia Kim ¿no?

Se preguntaba si lo haría bien, ciertamente no sabía cómo cuidar de sí mismo como para asumir una responsabilidad mayor, es más el que cuida de él siempre ha sido Jongwoon, y no ha tenido necesidad de hacerlo él mismo.

Tantos pensamientos rondando su inteligente cerebro lo mareaban, hasta juraría haber visto frente suyo a unos unicornios ¿Eso es normal? No, ciertamente no lo es, y podría ser por la preocupación que sentía o por qué se estaba volviendo loco, bueno prefería ser loco a lo otro, pero eso era algo que no podía permitirse, el Gran Kim Kyuhyun… aún no se acostumbraba a tener otro apellido, bueno la esencia del Gran Cho Kyuhyun es tan genial como para ser tomado por loco, demente o psicópata.

Los minutos pasaban y aún seguía en la misma posición, y a decir verdad nunca antes en su vida lo hubiera dicho, pero “este sillón es tan cómodo” ahora que lo pensaba nunca antes había notado lo cómodo que es, tal vez nunca se dio cuenta, pero ahora le parecía el más cómodo del muy tal vez hasta exagerando, su elección había sido la correcta debe admitir; a los minutos comenzó a cerrar los ojos, si algo tenía que admitir era que las siestas que se tomaba eran relajantes y placenteras, casi renovadoras, cualquiera que lo viera pensaría que es un perezoso, que no hace nada por su vida, pero las críticas se las ahorraba, es más no les importaba, sí tal vez es un perezoso pero que bien se siente; al menos algo de provecho saca de su condición ¿no?

Mirando lo blanco que era el techo, se sorprendió al ver lo limpió que estaba, “Las empleadas hacen buen trabajo, tal vez debería de pagarles más… ¿Cómo hicieron para subir hasta allá?” Y es que la distancia entre él y el techo era grande, ideas locas cruzaban por su mente como “Hicieron una pirámide humana” “Usaron tacones de plataforma” o “Tuvieron que saltar demasiado para llegar” ideas tontas, pero que le divertían, cosas que no tiene sentido pero que le quitan el aburrimiento, y sin darse cuenta se iba quedando dormido, hoy iba a ser su 4 siesta en todo el día y la disfrutaría como las demás.

--♥--

—Me disculpo, señor. Debió quedarse dormido sin darme cuenta, lo lamento –La ama de llaves hizo una reverencia-
—No te preocupes, hiciste bien en dejarlo dormir, además –Lo observaba- ¿No se ve adorable?
—Sí y mucho... Él es muy afortunado de tenerlo a usted

Yesung no quitaba su vista de él, su respuesta se prolongó pues buscaba las mejores palabras que expresen su sentir.

—No, yo soy el afortunado por tenerlo a mi lado –No pudo evitar sonreír-

Mirarlo siempre le causaba ternura y más cuando dormirá, pues en esos momentos puede ver lo inocente que se ve, una voz lo sacó de sus pensamientos.

—Señor Kim, ya mande a una sirvienta a preparar su baño de espumas, pero como el plomero no pudo venir, tendrá que tomar su baño en la recamara de al lado ¿Desea algo más? –Dijo el ama de llaves-
—No, nada más gracias
—Y ¿Qué hago con el señor? –Refiriéndose a Kyu-
—De él yo me encargo

Sin decirle nada, el ama de llaves hizo una reverencia y salió de la habitación, dejando a un Yesung observando a un bello durmiente, y ahora que lo pensaba Kyuhyun se había hecho una mala costumbre dormir siempre y además de eso comer excesivamente combinaciones raras, se preguntaba si debía decírselo al señor Kim, aunque puede que él ya lo haya notado y si es así sería mejor, no quería volver a tener una pelea con el señor Kyuhyun a causa de eso, no otra vez no, su humor no es nada tolerable y más si este se enoja, fue un milagro que aun siguiera trabajando ahí, ¡un milagro!

Con mucho cuidado, como siempre lo hace cuando se trata de Kyuhyun, lo cargó en sus brazos, y este instintivamente con sus brazos se aferró a su cuello, al parecer no estaba tan dormido que digamos, Yesung se dirigió hasta la recamara que comparten, abrió la puerta con un poco de dificultad, curiosamente le recordaba a su luna de miel algo parecido sucedido, y ahora que lo analizaba Kyuhyun pesaba un poco más que antes, debe ser por toda esa comida que come el pobre, buena ahora eso le pasaba factura, se adentró más a la recamara, así llegar hasta la inmensa cama delante de ellos, lo supo porque sus rodillas chocaron con la orilla de la cama, y con sumo cuidado como si de un bebé se tratase aunque en parte sí, lo recostó en la cama, este todavía mantenía sus brazos alrededor de su cuello, esto imposibilitó que pudiera separase para tomar su baño.

—Kyu, cariño… Sé que soy irresistible, pero tengo que irme
— ¡No! –Se aferró más, provocando que estuvieran más cerca el uno del otro- Quédate conmigo –Hizo un puchero-

Ok, ¿Qué le sucedía? De seguro toda esa chatarra que se come le afecto, por eso actúa así.

—No, puedo... Tengo que bañarme ¿eh? Para que Oppa este limpió –Hasta parecía muy infantil hablar así-
— ¡No me importa! –Soltó una queja muy tierna- Quiero que estés a mi lado, Oppa

Ok, ahora si dudaba de que fuera Kyuhyun, SU Kyuhyun, él no hacia ese tipo de cosas aun si lo amenazaran con una revólver, nunca… NUNCA lo haría, si es así, entonces ¿Por qué ese cambio de humor?

Como pudo, se separó un poco del menor, mirándolo a los ojos.

— ¿Estas bien? –Tomo su frente, pero nada de fiebre, todo parecía normal- Actúas extraño Kyuhyun… -Se puso a meditar- ¿Quién eres? ¿Qué hiciste con mi Kyu?
— ¡Soy yo idiota! ¡Kyuhyun! Eso dice en mi acta de nacimiento –Este lo apartó de su lado, fastidiado-

En el rostro de Yesung se formó una inusual sonrisa, este SÍ era Kyuhyun.

—Este es mi Kyu –Dijo el mayor llamando la atención del menor, quien lo miraba con cara de “¿Qué mierd* dices?”-
— ¿De qué hablas? ¿Te drogaste? –Dijo mientras se sentaba con las piernas cruzadas quedando frente a Yesung-
—No… –No pudo evitar sonreír, las incoherencias del menor le alegraban el día-

Kyuhyun lo miraba extrañado, odiaba cuando no podía saber por qué Yesung sonreía tanto cada vez que lo miraba ¿Acaso su cara es graciosa? No, es imposible, es el perfecto… Entonces ¿Por qué?

Yesung observaba la confusión en los ojos ajenos, tan adorables, tierno y sexys…  tan provocadores, se acercó hasta Kyuhyun, quien hasta entonces no se había percatado del acercamiento, sino hasta que el rostro de Yesung estuvo a escasos centímetros del suyo, sin verlo venir el mayor atrapó sus labios al principio se quedó estático pero luego se sumó al juego, sintiéndose al principio tan inexperto pero luego acoplándose a los movimientos que su esposo imponía, Yesung de a pocos se iba acercando a Kyuhyun, haciendo que este cayera de espaldas a la cama, esto aprovecho Yesung para subirse encima de él y así poder besarlo y tocarlo con mayor libertad, con una mano se apoyaba para no recargar todo su peso en Kyu y con la otra  sujetaba su  cintura que luego fue bajando para así encontrar el inicio de la camisa que traía Kyu.

Mordía, lamía y besaba los labios ajenos, sintiéndolos ese momento más deliciosos que antes, ¿Cómo había soportado esas horas sin besarlo? Para él era algo inhumano estar lejos de su “fuente de deleites” y más cuando este se ponía cada día más sensual ante sus ojos, el menor que hasta entonces pensaba que solo era un juego que no iba a pasar de solo besos y caricias, soltó un leve gemido comprobando el error en el que estaba, pues Yesung no parecía pensar igual, y lo que provocó ese acto involuntario de su boca, fue que la fría mano del mayor se adentró en su ropa, tocando su pecho y seguido un pezón, provocando que el cambio de temperatura no le agradará.

—Y-yesung ¿No ibas a b-bañarte? –Dijo en cuanto este se dejó a un lado sus labios, para atacar su cuello-
—Tal vez lo haga después –Lamía y besaba la extensión de su cuello y como consecuencia provocaba que Kyu dejará escapar pequeños pero entendibles gemidos-
—P-pero –Yesung continuaba con sus apasionados besos y tocamientos, estremeciendo el cuerpo bajo suyo- debes… ir –Ciertamente Kyu no quería sexo, eso dice él pero su cuerpo todo lo contrario- E-es bueno asearse –Seguía insistiendo-

Yesung detuvo sus movimientos, se apartó de Kyuhyun dejándolo extrañado, si algo no es Yesung es despistado y pudo entender perfectamente lo que Kyu quiso decir.

—Si no estás de animó lo dejamos esta aquí –Fue lo que dijo para luego levantarse e irse a la habitación de al lado-
— ¿A-a dónde vas? –El menor sentía que Yesung se enfadó, pues el tono en el que le habló fue… ¿sombrío?-
—A bañarme –Dijo estando en el pasillo-

Kyu solo lo vio marcharse, sentía que había arruinado todo, pero si él lo quería así ¿cierto? Es verdad pero entonces por qué siente que es su culpa que su esposo se enfadará con él.

Quiso gritarle y decirle que regrese para seguir en lo que estaban porque en cierta forma Kyu lo quería, pero al reaccionar este no se encontraba cerca, por lo que iba a ser inútil intentarlo.
“Genial, ahora me siento pésimo… y ni tiempo me dio de contarle aquel asunto importante… Debí dejar que me cogiera rico y luego, luego decirle que esperamos un bebé. Al fin y al cabo, no podrá embarazarme más ¿no?”

--♥--

Con las sábanas cubría su rostro, eran las 11 pm y no podía dormir, y no es solo que no tuviera sueño sino también que desde que Yesung regreso de su ducha lo único hizo fue echarse a dormir, ni tiempo de hablar sobre lo sucedido le dio, a veces odiaba que este no quisiera tocar los asuntos pendientes.

Se revolvía en su parte de la cama, ¿Qué debía hacer? Decirle “¿¡Yesung, perdóname por rechazarte, ahora sí quiero, hazme otro hijo!?” Sacudió su cabeza, tratando de deshacerse de esas tontas ideas, aunque si tomas en cuenta el tipo de persona que es Yesung, puede que resulte… ¡Ja! Claro como si Cho Kyuhyun se rebajaría a tal cosa solo por sexo, ni siquiera si el mismísimo Shisus se lo pidiera, no ¡NUNCA!

Rodó un poco más, hasta estar de costado, dirigió su vista a Yesung, al parecer este dormía y… muy tranquilo.
“Genial, él si puede dormir sin remordimientos, pero yo no”

Empezaba a desesperarse, tenía que hacer algo o de seguro esa noche no dormiría, pensó algo, pero ¡NO! Era demasiado para Cho Kyuhyun, no, eso era rebajarse y no se permitiría eso… -Suspiró- ¡A la mierd*! Desde que se enamoró de Yesung ha hecho cosas que de a poco fueron destruyendo su orgullo y hacer una más, no cambiaría nada…

Sin pensarlo más, lo hizo… Removiendo sábanas, almohadas y demás se acercó lo suficiente como para quedar encima suyo, está bien, lo sabía parecía desesperado y necesitado de “afecto” sí un puñal más a su orgullo pero si era por Yesung valía la pena, colocó sus piernas a los costados del otro así tener un apoyo, y bueno ya que estaba en esas, despertarlo como quisiera no caería nada mal.

Le comenzó a piñizcar los cachetes con maldad como solo él sabe hacerlo, despertando inmediatamente a Yesung, quien trataba de apartar las escurridizas manos de Kyuhyun para que no sigan piñizcando sus cachetes, aunque el menor no tenía intenciones de detenerse, es más lo hacía como un medio de venganza contra Yesung por hacerle rebajarse, claro que sumando el hecho de que Yesung no se sabía del por qué ese ataque tan repentino lo hacía aún más divertido.

Cuando Yesung encontró la oportunidad de sujetarle las muñecas e impedirle seguir jugueteando con su rostro que por cierto se encontraba rojo en ciertas partes.

—K-kyuhyun ¿Qué te pasa?
—Solo estaba jugando –Soltó una risita-
—Deberías de estar durmiendo no jugando –Se le notaba molesto-
—No tengo sueño, Hyuuung –Hizo un puchero, no podía creer lo que estaba haciendo-
—Kyuhyun actúas muy raro, me estas asustando
—No deberías de tener miedo, Hyuuungmin –Se acercó al rostro de Yesung, intentando robarle un beso, pero no lo consiguió-
—Kyuhyun ¿No te entiendo? Primero no quieres y ahora ¿quieres? ¿Por qué rayos ese cambio? –Adoraba cuando su Hyung se resentía con ese tipo de cosas-
—Porque sí ¿Tú no quieres?

Yesung le quedo mirando por un rato, era obvio que quería pero su orgullo estaba resentido y aceptarlo le costaba.

— ¡Esto es manipulación, Kim Kyuhyun!
—No entiendo por qué te haces tanto problema, hace poco eras tú el que quería comerme por si no recuerdas
—Sabes, mañana tengo que ir a trabajar por si no recuerdas…
—Jongwoon –Hizo una rabieta- Deja tu maldito orgullo y bésame –Nunca imagino decir tal cosa-
— ¿Tan desesperado estas amor? –Soltó una risita- ¿Tanto me necesitas? –Le causaba risa la actitud del menor-
—Lo que me desespera es tu falta de decisión, idiota… Y si no me lo das tú, tendré que irme a buscar a alguien que sí esté dispuesto -Finalizó-

Esa sonrisa que estaba dibujada en los labios del mayor se borró, ¿Acaso estaba loco? ¿Cree que dejaría que alguien más lo tocará? ¡Ni aunque se acaba el mundo!

— ¿Serías capaz de eso?
— ¿No me crees? –Se levantó y a paso lento encaminaba a la puerta-
— ¿Crees que caeré en tus provocaciones? Por favor ya madura
—Me pregunto sí Siwon seguirá teniendo el mismo número celular de antes… -Habla sin tomarle importancia y con mucha pero mucha intención de que el mayor se desesperé- Él sí que me comía con la mirada –Se acercaba a la puerta-
Estas cruzando una zona muy  peligrosa, Kim Kyuhyun. ¡Vuelve! –Lo amenazó, ahora si se ponía nervioso, cuando el menor se proponía algo lo conseguía-

Kyuhyun amaba provocar al mayor, siempre tan perturbable aunque no lo aparente

—Veamos, tal vez después de Siwon, vaya a visitar a mis antiguos novios, así recordar viejos tiempos…

Iba a seguir hablando sandeces con la intención de poner celoso a Yesung, pero no pudo continuar cuando sintió unos brazos por detrás rodearle la cintura, impidiéndole seguir caminado, luego sentía como el cuerpo se le estremecía al escucharle susurrar al oído.

— ¿Crees que te dejaré alguien más te toque? –Hacía más fuerte su agarre- Ni siquiera en una orgía te podrán dar lo que yo te doy
—Tardaste, amor –Se dio la vuelta así quedar en frente a Yesung-

Ni bien se vieron a los ojos, se acercaron el uno al otro en un beso fogoso, Yesung dirigió sus manos a la cintura de Kyu, mientras este se aferraba a su cuello, para luego bajar hasta la parte trasera de los muslos de su pierna, y sujetarlo con fuerza para luego levantarlo, este instintivamente cruzó a la cadera del otro, sin dejar de besarlo, Yesung se fue encaminando de regreso a la cama, para luego dejar caer con atención a Kyuhyun de espaldas, obviamente sin despegarse de él.

Fue cuestión de tiempo para que ambos se despojaran de su ropa, y claro disfrutándolo al hacerlo. Sonrojos, gemidos, mordidas, lágrimas, suspiros, estremecimientos, hasta orgasmos tuvieron ese par.

--♥--

Sus manos se encontraban apoyadas en su pecho, así tener un soporte mientras se auto-penetraba, mantenía las piernas firmes a los costados de Yesung aunque por ratos las sentía como gelatina, de sus labios salían gemidos de dolor y goce ya no le importaba si eran fuertes y estruendosos pues Yesung era tan enorme que lo llenaba por completo, ahora entendía porque tan pronto lo embarazo, pues con semejante hombría ¿Cómo no hacerlo? Sin duda no cambiaría esta oportunidad por nada del mundo.

Bajaba y subía ante la expectativa mirada de Yesung, quien lo observaba con lujuria y como no, sabía que era demasiado sexy por eso Yesung siempre andaba acosándolo, de seguro si pudiera él también se acosaría; Tal vez el hecho de ver a su esposo en esa situación era la imagen más erótica antes vista por sus ojos, pero Kyuhyun lo hacía lento ¿Acaso lo quería matar de desesperación?

En un descuido del menor, Yesung salió del menor y en un movimiento rápido cambió de posiciones, ahora era este quien se encontraba arriba y sin advertirle nada, lo penetró; sacando de los labios del menor un dulce, ardiente y excitante gemido como reclamo a sus actos, para luego pedir por más y como Yesung obedecía a los deseos de su querido esposo gustoso accedió a complacerlo.

En un ritmo constante ambos cuerpos sudorosos gemían casi al mismo tiempo, dejando escapar ese desahogo de energía que les daba placer y los hacía tocar el cielo, mientras Kyuhyun se aferraba con sus manos a la espalda de Yesung y clavando sus uñas al sentir el orgasmo aproximarse, el mayor le masturbaba para que así como él, sintiera el placer que siente al estar dentro de esa estrecha entrada de la cual sus paredes lo aprisionan haciendo dificultosa la penetración pero a la vez satisfactoria.

Fue solo cuestión de minutos para que Kyuhyun alcanzará el orgasmo y se derramara en su abdomen y también parte de Yesung, y al igual que el menor Yesung soltó un último gemido en señal de hacer llegado al clímax del orgasmo, dejando su esencia en el interior de su esposo, sintiendo el menor un líquido caliente ya conocido llenándole para luego escurrírsele por entre las piernas al momento que Yesung salió de su interior, soltando un último gimoteo.

El mayor se recostó a su lado, tratando de normalizar su agitada respiración en seguida dirigió su vista a Kyuhyun, quien con un brazo se tapaba el rostro tal vez para esconder su notorio sonrojo, con paciencia se acercó hacia su esposo, con una cálida sonrisa en los labios.

— ¿Sucede algo? –Dijo mientras los abrigaba a ambos con una cobija-
—E-es que… no te he dicho algo aún…
—Lo puedes decir mañana –Le iba a dar la espalda para dormir pero una mano le sujeto el hombro impidiéndoselo-
— ¡No! E-es que… es algo importante –Bajo la vista-
—Sabes que no te obligaré a hacer algo de lo que no estás seguro…
—No es e-eso –Se ruborizó-
— ¿Entonces?
—E-es solo q-que… me avergüenza decirlo.
—Puedes decirlo cuando quieras
—Y-yesung… hay alguien que vendrá hacía nosotros
— ¿Alguien? ¿Quién? -Confundido-
—No sé si es hombre o mujer, pero sé que vendrá dentro de 7 meses
— ¿Por qué tanto? –Ahora sí que no entendía nada-
—Es porque tiene que crecer… y demora
— ¿Crecer? Kyuhyun ¿qué tratas de decirme?
—Es que…

Calló unos segundos ¿Cómo explicar algo tan serio? Pensaba que iba a ser sencillo pero resulto más difícil de lo que pensó.

—Lo que trato de decirte es que –Tomó la mano de Yesung y la dirigió hasta su vientre- … él o ella está aquí.

La cara desencajada, la notoria confusión y la palabra “¡¿Qué?!” encajaban perfectamente en el rostro de Yesung ¿Qué había dicho?

—Tú… Yo… ¿Qué? ¿Un qué?... ¿Cómo? –Procesando… procesando-
— ¡Ahh! Deja de hacerte el idiota… Un bebé, eso es lo que tengo aquí y como… eso lo sabes perfectamente –se sonrojó-

Sin verlo venir, Kyuhyun estaba en brazos de su esposo, abrazándolo con fuerza

— ¿De verdad? -asintió-
—Era lo que te quería decir esta mañana pero no por teléfono, sino personalmente…
—Ahora entiendo esos cambios de humor –Le acarició una mejilla- y también los antojos medio extraños que tienes
—Pues… tendrás que soportarme por un muy tiempo, porque me embarazaste –Hizo un puchero-
—No te preocupes… Podré con eso –Acomodó a Kyu entre su pecho-


Pronto el cuarto se llenó de un silencio pero no incomodo sino tranquilo, una acogedora, a cierto punto pacifico… Kyuhyun estaba muy atento a todo lo que Yesung hiciera, este lo observaba como si él fuera su mundo, avergonzándolo un poco al tener su mirada fija en su persona; al transcurrir los minutos los ojos de ambos fueron cerrándose del cansancio, hasta terminar profundamente dormidos…

sábado, julio 06, 2013

Declaración + Extra


[N/A- Me demore casi una madurgada en escribirlo, por ello ahora tengo ojeras ;_; ... Denle mucho amor ●ω●]

Los nervios se apoderaban de él, si antes estaba tranquilo ahora era un manojo de nervios, se preguntaba del por qué lo hizo sin antes haberse preparado u organizado. 

“Hay un rumor en toda la escuela, dicen que Kibum se le declarará a Yesung mañana en la salida”

Ah… es cierto, sus malditos celos le hicieron perder la razón, pero en ese momento no pensó en lo que pasaría después, no pensó en qué hacer cuando él llegué ni mucho menos que hacer cuando lo tenga en freten, definitivamente este no era el Kyuhyun normal, él nunca planearía algo sin antes haberlo anticipado, pero el simple hecho de saber que por una declaración perdería a su Hyung lo alteraba y sacaba de quicio.

Sus torpes manos sudaban y temblaban, no estaba apto para sostener algún objeto o este caería de seguro.

“Ahora ¿Qué dirás?... Yesung te amo, ¿sé mi novio?”

No, definitivamente eso no servía, si l4e iba a declarar sus sentimientos tenía que idear algo pero ¿qué? El maldito tiempo se le acababa y no tenía nada planeado y para rematar con su mala racha, su ingenioso cerebro no salía ninguna brillante idea y eso le irritaba.

“¡Estoy hecho un lío y todo por tu culpa, Sungmin!”

A este punto de su “alboroto interior” no le importaba si por sus gritos lo creyeran loco o algo por el estilo, pero ¿por qué no gritarle a ese conejo? No sabía si había hecho bien en seguir el consejo que le dio de adelantársele a Kibum, pero sobre todas esas cosas que rodeaban su mente estaba el miedo a el rechazo del mayor, si eso pasaba literalmente moriría en vida, eso sería lo peor… De solo pensarlo el corazón le late con fuerza, tanta que duele.

“¡Hey, Game!” Su cuerpo se tensó ‘Demonios’ maldecía interiormente, reconocía perfectamente aquella voz como si fuera su propia, dio media vuelta para encontrarse cara a cara con su destino, ahí estaba a unos cuantos metros de él, manteniendo una radiante sonrisa en el rostro, puesto traía unos jeans ajustados negro, un polo blanco y una casaca de cuero, todo perfectamente moldeado a su cuerpo.

El pobre Kyu no podía evitar quitar sus ojos de encima, se veía condenadamente bien, en cuanto esos ojos negros se posaron en los suyos desvió la mirada, le incomodaba sentirse así con una simple mirada suya, a cada paso dado por él era un fuerte latido más, sentía que debía ocultar su nerviosismo, pero hasta a él mismo le costaba ser firme en esos momentos.

-Ya estoy aquí… Sabes es muy raro que tú me llamarás, casi ni creí que era tú -Tocó su cabello, despeinándolo un poco-

- Pues debes de sentirte honrado de que así fuera -Inflo un poco sus cachetes, trataba de ser el Kyuhyun de siempre, él que no se acobarda por nada y él tiene un atroz sarcasmo-

- ¡Hey! Ya basta, ¿Qué ibas a decirme? Por teléfono parecía que era algo importante

- Ahmm pues ni tanto, en realidad creo que ya olvide que era -Mentía, sí sabía el por qué lo llamó, solo que no estaba seguro de decírselo, era vergonzoso-

- ¿En serio? Entonces vine por nada -Suspiró, Kyuhyun sabía que lo que venía era un reprendida de parte del mayor-

- ¡Te amo! -Dijo lo más rápido que pudo, de inmediato sus mejillas se ruborizaron, rogaba porque no lo haya oído-

- ¿Qué? Perdón ¿Qué dijiste? -Bien al parecer no había escuchado-

- N-nada -Con una sonrisa falsa bajo la mirada-

El silencio se hizo presente entre ambos, Kyuhyun ya no sabía si había sido bueno idea estar en ese lugar, tal vez debería de irse y olvidar todo.

- Yo también

- ¿¡Qué!?

- No es nada -Una sonrisa triunfante apareció en los labios del mayor, quién dio la media vuelta y comenzó a caminar de regreso-

Kyuhyun de inmediato lo miró, ¿había escuchado bien o qué? Había dicho que también o lo había alucinado… -Analizando- ¡No, eso no podía ver sido una alucinación! Sino ¿por qué se burló de él?

No pensaba que fuera así, su corazón latía con fuerza, sus manos temblaban y qué decir del rostro de Kyuhyun, toda roja de vergüenza, ¿Lo había escuchado?

- ¡E-espera! -En cuanto reaccionó su Hyung estaba a una distancia prudente, se acercó a él lo más rápido que pudo, tenía muchas cosas dentro de sí que tenías que ser escuchadas por él… Aunque no estaba seguro de por dónde empezar, solo quería sacar ese peso de encima.

Se quedó enfrente suyo, no sabía como pero estaba molesto con él, tal vez era por el hecho de no haberle dicho antes que también le gustaba y esperar a que el pequeño lo dijera, eso le molestaba.

- ¿Desde cuándo? -Le reclamaba- ¿D-desde cuando te gusto?

- No lo sé -Dijo de una manera que hico enojar más al Game-

- ¡S-si lo sentías por qué nunca me lo dijiste! ¡Eres un estúpido!

- Porque quería que fueras tú el que diera el primer paso -Le sonrió cosa que lo irrito aún más-

- ¿Querías que me ridiculizara en frente de ti?... ¡Eres un…!

Tomó su rostro sin permiso previo, haciendo que automáticamente el Game se callara solo por el hecho de aquel acercamiento, este se acercaba peligrosamente al rostro del menor, quien sin darse cuenta iba ruborizándose, se odiaba por actuar así, él nunca lo hacía pero estando frente a Yesung se comportaba totalmente diferente… A medida que el rostro de Yesung iba acercándose al de Kyuhyun, este cerraba los ojos.

Yesung sin compasión  hacia el joven lo beso callándolo, a veces ese pequeño lo exasperaba, pero más que eso lo enloquecía por completo.

- No cierres la boca –Dejo de besarlo-

- ¿Q-qué? –Inconscientemente Kyu cerró exageradamente su boca, bueno era de esperarse era su primer beso y no sabía cómo besar-

Otra vez se aproximó a besarlo, esta vez Kyu lo obedeció y no cerró su boca, dándole más facilidad a Yesung de moverse en su boca, por primera vez Kyu se sentía bajo el poder de alguien más y era una sensación completamente extraña para él y también agradable.

Yesung podía pasar todo el tiempo en los labios de aquel joven inexperto, sabía que no debía hacerlo pero aun así ya lo estaba besando, algo que siempre deseo de aquel Game.

- Kyu –Dijo al momento que se separó-

El menor tenía la mirada gacha y en lo que se podía apreciar de rostro se notaba lo ruborizado de ambas mejillas, la mirada perdida y ciertamente confundida, los labios entreabiertos sin saber que decir y su mismo ser tan sumiso y embelesado en su propio mundo…

- Kyu… -Aproximó su rostro al de él- Me enamoraste desde un principio… -Tenía infinidad de cosas por decirle que le mismo tiempo se volvería escaso para ambos- ¿Quisieras siempre estar a mi lado? –Kyu elevó la mirada-

Eso significaba ¿Qué exactamente?...  ¿Estar a su lado siempre? ¿Qué quería decir con exactitud? Yesung le pedía ser ¿novios? Pero era una forma tan extraña de pedirla, tanto que el mismo Kyu no sabía que es lo que en realidad quería… Odiaba cuando el mayor le hablaba metafóricamente

- ¿Qué?  -Kyu podía pensar sinfín de significados a la petición del mayor y entre ellos el único al que le encontró sentido fue…- ¡¿Solo quieres que sea tu amante?! ¡Búscate a alguien más! ¡IDIOTA!

- ¡¿Qué, de qué hablas?! Yo solo quería

- ¿Qué piensas? ¿Qué soy seré tu putita? ¡Estás loco! Prefiero mil veces… -Es interrumpido-

- ¡Me estas malinterpretando yo quería pedirte que seamos novios! NO que seamos amantes, yo nunca he dicho eso

- ¿Qué? ¿De verdad?

- ¡Es lo que he tratado de decirte! –Ahora Yesung estaba enojado con la actitud tan anticipada del menor- ¿Cómo puedes pensar eso? ¿Tengo cara de pervertido-depravado de menores?

- ¡Sí!

- ¿Qué? –Acaso le había dicho que sí era todo eso que el profesaba-

- ¡Que Sí acepto!... –Bajó la mirada, últimamente verlo era letal para Kyu- A-acepto -Confirmó-

- ¿Es enserio? –No creyendo lo que oía; el menor asiente tímidamente- Entonces mírame a los ojos…. Mírame y sabré si es verdad; mírame y descubriré tus sentimientos; mírame y dime otra que sí… Con una simple mirada tuya confirmaré la verdad de tu alma.

- ¿Qué? –Alzó la mirada, observándolo fijamente- ¿Acaso puedes leer las miradas de las personas? –Trataba de ser del de siempre y no parecer tan dócil frente a él- ¿Eres adivino? No me hagas reír

Y otra vez sin importarle lo poco que piense Kyu al respecto, estampo sus labios contra los ajenos, acallando los vanos esfuerzos del menor de arruinar una declaración improvisada.

- ¿Por qué tienes un léxico tan atrevido? –Volvió a besarlo, sonrojando más a Kyuhyun- Pero no te preocupes, yo hare que eso cambié –Con sus labios atrapo los impropios-

Al parecer Yesung encontró ese punto débil de Kyu, el que hacía que el menor bajará la guardia, abriera una puerta directo a su verdadero ser, ¿y por qué negarlo?  Le estaba encantando besarlo…

Quien iba a decir que tal y como dijo Yesung, ambos estarían siempre juntos

--♥--

- ¿A sí que así ocurrió? -Dijo-

- Si querido, así conocí a tu padre ¿Alguna otra pregunta más?

- ¿Por qué tengo dos padres y los demás solo uno?

- Porque eres muy afortunado, cariño –Dijo otro hombre que se acercaba a las dos personas que más quería en el mundo-

- Llegas temprano –Inmediatamente una sonrisa se formó en su rostro-

Dijo el otro quien tenía a un pequeño niño aproximadamente de 8 años en su regazo, a quien acariciaba la cabeza, tal vez para que durmiera algo que estaba consiguiendo…

- ¿Qué pasó? –Dijo señalando al infante, para luego acercarse a quien lo tenía en su regazo y depositarle un beso-

- Quería saber cómo nos hicimos pareja, claro que exceptúe algunas cosas no aptas para niños… -Dijo mientras terminaba de acariciar al niño-

- Volvió a preguntarlo cierto…

- Lo escuchaste ¿o no?

- Lo sé -Suspiró- A veces –Se sentó junto a quien era su esposo y junto a su hijo- quisiera que pudiera entender la situación, pero aún es muy pequeño para entenderlo ¿cierto?

El otro con una mano tocó la mejilla de su pareja, para que así lo mirará

- Yesung sé que no podemos hacer que él lo acepte eso dependerá de él, pero no lo subestimes, aunque tenga aun 8 años sabe muy bien que ambos lo amamos y no cambiará, así como sé que nos quiere a ambos… Si te preocupa tanto que él más adelante nos juzgue por ser una familia, y puede que algún día lo haga debemos de tener esa posibilidad en mente y saber cómo afrontarla…

- Tienes razón… -Fijó su vista en aquel pequeño que ahora dormía plácidamente, quien descansaba su cabeza sobre las piernas de su otro padre- Es algo de lo que, aunque no lo hayas dicho, sé que lo pensabas al momento en que lo teníamos

Kyu acercó su rostro al de su esposo con la intención de besarlo, quien por cierto estaba a su lado derecho, este correspondió al beso, aunque tuvieron separarse pues al parecer al momento que Kyu se acercó se movió e incómodo al pequeño, haciendo que refunfuñara en señal de molestia

Kyuhyun inmediatamente acarició al pequeño para que siga durmiendo, pues como todo niño odiaba que lo despertará y si lo hacían iba a estar molesto todo el día o hasta que se le pasará.

Eran las 10 de la noche y aunque sea temprano para Yesung para Kyuhyun era tarde, pues él era el que más cuidaba del niño y por ende cada vez que este iba a dormir él también lo hacía, y como si fuera algo mecánico a la hora fija comenzaba a sentir sueño, y esta vez no iba a ser la excepción.

- Deberías de dejarlo en su cuarto… Se mal acostumbrará a siempre dormir con nosotros –Dijo viendo que la hora de dormir se aproximaba-

- No, déjalo acá… Solo por esta vez –Acomodó al menor en medio de la enorme cama-

-Suspiró, no podía decirle que no- Esta bien…

Yesung se cambió de ropa y se acomodó en una de las orillas, entrando junto a los otros dos. Kyu y el niño tenían los ojos cerrados, le causaba ternura verlos a los dos… Se acomodó mejor de costado y así apreciarlos mejor.

- Kyu ¿Estas durmiendo? –Susurro para no despertar a su hijo-

- Aún no –Dijo en voz baja, aun con los ojos cerrados-

Luego de un silencio prolongado, volvió a hablar

- ¿Lo recuerdas? –A este punto hablaban en susurros-

- ¿Qué cosa? –Kyu también hablaba susurrando-

- Lo de estar siempre juntos… ¿Recuerdas que te lo pedí?

- Sí y ¿Qué con eso?

- Que de verlos a los dos -Sonrió- Me doy cuenta que se está cumpliendo

-Kyu abrió los ojos- Es cierto, a mí me ocurre lo mismo -Confesó-

- Gracias

- ¿Por qué? –Ya sospechaba a que se debía pero aun así quería oírlo de sus labios-

- Por estar en mi vida… gracias

- Tonto, hablas como si no me hubiera quedado de otra que aceptar entrar en tu vida… Aun si no me lo hubieras pedido, siempre hubiera estado ahí, tonto –Kyu se media en lo que iba a decir, pues delante del niño no podía decir palabrotas que bien merecidas tenía el mayor-

- Y deseo que siga así eternamente –Extendió su mano hasta lograr acariciar sus cabellos castaños, haciendo que Kyu se sonrojará-

- Y-ya duérmete –Dijo tapándose el rostro hasta la nariz-

- Tienes razón –Alejó su mano- Buenas noches

Si habían permanecido juntos 10 años podían hacerlo unos 10 o 100 más, porque no importan las contradicciones o malos ratos, ellos podrán afrontarlos, y mantener intacto el amor que en un inicio se confesaron




FIN

martes, junio 25, 2013

One-shot Yaoi

Intento Fallido [Yehyun]

El incansable e insistente despertador, sonaba obstinada mente, hasta lograr su único fin despertarlo de golpe, aunque este seguía recostado pues el día anterior fue muy agotador y cansado para él, rodó por su cama hasta llegar a un extremo de este, para quedar boca abajo, con una mano intentaba o eso parecía pues lo hacía sin ganas, apagar aquel molestoso aparato. Intento volver a dormir tratando de acurrucarse con su sábana, pero ya no podía, había perdido el sueño, ese día había planeado quedarse dormido si es posible una semana entera o más, no le quedo de otra que levantarse, pues le aburriría estar echado sin hacer nada, no sin antes maldecir al inocente despertador que solo cumplía su función, su celular sonó, era un mensaje de su amigo, el cual decía: “Oye Kyuhyun recuerda que hoy me tienes que acompañar, no lo olvides ^.^”-se encamino hasta el baño, pues ayer había bebido mucho jugo de manzana tal vez en exceso, al regresar paso por el pasadizo el que ya conocía de memoria, pues estaba en un apartamento propio compartido con su hyung, al pasar por ahí no pudo evitar mirar aquella puerta color caoba en la que siempre entraba, hecho un vistazo al reloj de pared más cercano, notó que eran las 6:15 AM, “Aún es temprano” pensó mientras en su rostro se dibujaba una sonrisa maliciosa, no lo pensó mucho y ya su ser se adentraba en aquella habitación, con cuidado de no hacer ruido junto la puerta y se dio la vuelta para observar a su “presa” aun durmiendo, se acercó sigilosamente a su cama, aquella en la que en varias oportunidades había visitado y hasta dormido en ella, un bello durmiente ya hacia pernoctando en ella, el otro tenía que admitirlo, su “presa” era salvajemente sexy, aun si dormía, en su mente malévola había planeado su venganza a su hyung, por haberlo dejado sin poder caminar un día entero acompañado de un inmenso dolor en su parte trasera, en aquella ocasión su “presa” se volvió un tosco aunque tenía que aceptarlo le gusto, lo disfruto, lo deseo…
Su plan era seducir a su hyung hasta dejarlo demasiado excitado y en el momento del hecho, dejarlo con su despierto “amiguito”, se lo va a tener bien merecido. Por un momento dudó ¿Qué pasa si su plan no sale como lo espera? O ¿si no puede contenerse y dejarse llevar por los mimos de su hyung? O peor aún no poder controlar a su hyung, pues su hyung es más fuerte que él y aunque pusiera fuerza o no, si no tenía la mente fría se dejaría llevar por él. Sí, eso tenía que hace, tener la mente fría, pensar muy claro su objetivo. Sin pensarlo más, se introdujo bajo las sabanas del mayor, el cual dormía de costado, dándole la espalda a su dongsaeng, el menor deslizo una mano por la cintura del mayor, pero este ni se inmuto, se adentró aún más hasta llegar a su pecho, delineando con sus dedos su formado pecho, este acto no tardó en hacer su efecto, pues los fríos dedos del menor hicieron contacto con la tibia piel del mayor, este despertó dándose la sorpresa de un “intruso” en su lecho, rápidamente se dio la vuelta, pero ni bien vio quien era, este otro aprovecho para quedar encima de su “presa”.
-Kyu ¿Qué hace…? –No termino de hablar al sentir esos labios suculentos besando exigentemente los suyos-
Quedo helado por un momento, pues Kyu no era normal ver a Kyu seduciendo, siempre que tenían intimidad, era él el que llevaba el papel de seductor. Esta ocasión era diferente o especial, no importa cuál era la razón su baby Kyu se le estaba regalando en bandeja de plata y no iba a desperdiciar esa mañana. Yesung correspondió al beso y caricias de Kyu. El menor introdujo  sus manos por debajo del polo ligero del mayor, volviendo a sobar, tocar, acariciar la ahora ardiente piel de Yesung mientras que las del mayor tocaban las caderas del otro, llegando hasta el borde de su pantalón de pijama intentando adentrarse en ellas. Kyuhyun reaccionó rápidamente, esto se escapaba de sus manos, dejo lo que hacía para sacar las manitas de Yesung de sus nalgas.
-¿Qué pasa? –Pregunto un desconcertado emo- ¿No te gusto?
-Yo…-Kyu sabía perfectamente que mentiría si dijera que no le gusto, pero tenía que decir algo para justificar su acción sin revelar sus intenciones- Es que… vas muy rápido hyung.
-¿Rápido? Pero si tú eres el que entra a mi habitación sin previo aviso a hacerme el amor… ¡en la mañana! ¿¡Y dices que yo soy el rápido!? –Sonrió ante el avergonzado rostro de Kyu, era tan adorable ver a su dongsaeng sonrojarse, llevo uno de sus manos al rostro de su Baby Kyu y lo acarició, reconfortándolo- Bueno, me voy a duchar –Bajando a Kyu de encima de él, echándolo a su costado y dándole un beso cálido en la frente-
El menor se quedó desconcertado, su plan falló, ¿Qué podía hacer?, no quería que se vaya, quería que terminara lo que empezó o mejor dicho lo que él había empezado, tomo de la muñeca a Yesung, no lo dejaría irse, lo acercó hasta él, nuevamente lo besó con mucha necesidad, “Que importa la maldita venganza, quiero que me hagas tuyo Yesung” pensó mientras lo tomaba del cuello y lo atraía a él, haciendo que este caiga encima de él, Kyu abrió sus piernas para que Yesung se acomode en ellas, mientras se dejaban llevar por sus deseos. Entre caricias se fueron despojando de sus prendas, fue fácil para el mayor quitarle el pijama a Kyu, tirándola por donde cayera, lo mismo hizo el menor, Yesung manoseó sin pudor a Kyu, tocándolo con desesperación por donde sus manos lo guiaran, dejó de besarlo para atacar su cuello, dejándole marcas a Kyu, quien gimoteaba ante sus roces…

[Horas después]   
Eran aproximadamente las 11 de la mañana, a esa hora el sol ya desprendía su grato calor, los rayos del sol cayeron en su rostro, haciéndolo abrir sus ojos, rodó por su cama para que no le lleguen los rayos de luz, quedando boca abajo, su rostro se escondía en su almohada, esta tenía algo extraño, olía a… al shampoo de… ¿Yesung?, de golpe alejo su rostro de la almohada y se dio cuenta que no era suya, sino la de Yesung… Se sentó de golpe, sintió un leve dolor en su parte trasera y se dio cuenta que estaba desnudo y solo, con una sábana tapándolo, miro su alrededor, dándose cuenta que no era su habitación sino la de…¡Yesung!. Por un momento se olvidó del por qué está ahí y además de eso, ¿Qué pasó? ¿Qué hizo?, al formulas estas preguntas encontró respuestas para cada una y recordó que hace unas horas hizo el amor con Yesung, se sentía tan idiota por no haberse controlado “Malditas hormonas”, maldecía por no haber cumplido su “venganza”, todo se volteo a favor de Yesung “Aish”, renegaba mientras inconscientemente pataleaba como si fuera un niño chiquito, esa actitud en él no iba a desaparecer nunca.
- ¡Maldito! ¡Te saliste con la tuya! -Dijo a la nada, descargando su enojo en… nada- Te aprovechaste de mi
- Te equivocas -Dijo una voz grave a una distancia prudente de él la que conocía perfectamente, esto hizo que diera un brinco- Yo no fui él que se escabullo en mi cama a provocarme
El menor con temor dirigió su mirada a aquella persona ¿Lo había escuchado? bueno eso era seguro y ¿Ahora que haría?, la mismo instante de encontrarse con aquella mirada tan profunda escondió su rostro con ayuda de las cobijas “Demonios” odiaba cuando Yesung tenía esa mirada tan seria y atemorizante.
Al tener la mirada bloqueada no pudo saber que lo que hacía Yesung, pero este tampoco hacia ruido alguno “Demonios, ¿se habrá ido?” pensaba, no queria arriesgarse por lo que no bajo la cobiza de enfrente de su rostro para no verlo, en cierta forma le avergonzaba lo que había pasado.
Luego de unos segundos pudo escuchar pasos que obviamente se dirigían hacia él, a cada paso su rostro se ruborizaba más y se sentía tan tonto actuando de esa manera, en un solo segundo aquel pedazo de cobija que le cubría el rostro fue arrebatado de sus manos, y lo dejó al descubierto.
Unas manos atraparon su rostro haciendo que se miraran solo unos instantes para después besarlo, Kyuhyun trató de alejar a Yesung, pero este se lo impedía.
- ¡Ah!… ¡D-detente! -Dijo cuando tuvo la oportunidad de separarse un poco- 
Al mayor parecia no importarle los reproches del menor, este solo lo seguía besando hasta que Kyuhyun desistió de seguir forzando, ¿A quién quería engañar? Los besos de Yesung siempre le gustaran y eso no puede negarlo, ni él ni su propio cuerpo.
Ambos bocas danzaban al mismo compás e intesidad, Yesung se fue acercando más a Kyuhyun hasta quedar encima de él.
- ¿No recuerdas lo que pasó? -Con el rostro rojo como tomate negó- Te haré recordar lo que hicimos -Volvió a besarlo-