domingo, junio 30, 2013

No todo esta perdido [Yehyun] Cap. 2

Capítulo 2

N/A: YunJae padres de Jongwoon

“¿Woonie? Woonie” El recién llegado movía delicadamente al que por ahora dormía “Despierta” Seguía moviendo a ese cuerpo inerte que no tenía la mínima intención de obedecer a su progenitor “¡Diablos Jongwoon! ¡Tienes el sueño pesado igual que tu padre!”

El mencionado despego su cabeza de aquella almohada que hace instantes había estrangulado mientras dormía, su vista era algo nublada debido a las legañas que aún tenía en los ojos, se sentó perezosamente, dando cara a aquel hombre de facciones femeninas que lo miraba interesado, y eso solo significaba una cosa, Yesung lo sabía, su Omma era bien sobreprotectora y se podría decir que algo metiche, pero un poco más que algo… Si pronto vendría la lluvia de preguntas, y lo peor era que Yesung no tenía intención de responder a sus interrogantes en ese momento, suspiro frustrado, aun adormecido por ese levante tan repentino, pero que interiormente sabía que ocurriría.

“Hijo ¿Qué haces aquí?” Comenzó “¿Por qué nunca me avisas cuando llegas a casa? ¿Y tú marido? ¿Ese pequeño lucifer vino contigo? porque si es así no lo saludaré, no es que lo odie, pero sabes que no soporto a su familia ¿Qué pasa? ¿Volvieron a pelear? Jongwoon ¿No me vas a responder? Jongwoon, sabes que odio que me ignoren”

“Ah ¡Mamá basta! No me gusta que me ataques con preguntas”

“Lo hago porque tengo un hijo desconsiderado que cada vez que se le da la gana, viene a visitarme y no se apiada de sus pobres padres” Y como si fuera telenovela antigua, Jaejoong dramatizó el estar llorando

“Omma… No quise…”

“Ok, te perdono, ahora dime ¿A qué se debe tu visita?” Demonios, había caído otra vez en la trampa de su madre, muy astuto cabe decir.

Suspiró una vez más, ya no recordaba cuantas veces en esos últimos días lo había hecho, tal vez su juntaran todos sus suspiros podría crear un tifón, o algo parecido. No le quedó de otra que contarle a su madre lo que había pasado, de todos modos tarde o temprano lo sabría, pero hubiera preferido que hubiese sido de otros y no de él, así por lo menos no tener que escuchar los sermones o tal vez halagos de parte de sus padres.

“¿En verdad?” Dijo interrumpiendo la casi exposición que su hijo le daba “¿Te divorciarás?” Dijo mostrando algo de asombro

“Pues, técnicamente si” Dijo algo ido viendo atento el cambio drástico del rostro de su Omma.

“Hoy debe ser mi día, primero tu padre culminaría un trabajo exitosamente y ahora tú, vienes y me das la mejor noticia que he estado esperando desde que te casaste” Dijo como si fuera lo más normal de mundo

“¿De verdad querías tanto esto?” Ok, no esperaba menos sobre la actitud de su Omma, pero aun así no le agrado nada que siguieran pisoteando más y más el amor que él le tenía a ese muchacho, claro que no le dolió tanto como cuando lo hizo Kyuhyun, pero aun así le lastimó que fuera su Omma.

“Hijo no te voy a mentir, pero nunca me agradó y dudo que en un futuro, por supuesto lejos de ti, me agrade, lo siento pero es la verdad” Le dijo dando su opinión que aunque dura era verdadero.

Ahora Yesung llegaba a pensar que la decisión que tomo fue la correcta, de todos modos iba a terminar tarde o temprano… tardo pero llegó, que es lo que importa ¿no? Sí definitivamente ahora se convencía a si mismo que era lo mejor, tanto para él como para Kyuhyun, fue tonto pensar que iba a funcionar, “sí muy tonto”.

--♥--

“Y-yesung” se removía “N-no… ¡Yesung!” Se levantó de golpe, su frente sudaba, su corazón latía enormemente y sus manos temblaban, su amigo que había llegado casi corriendo por el grito que lanzó su amigo, se acercó a él, aun con la expresión de estar preocupada por él.

“Kyu ¿Estás bien?” Le tocó la frente para asegurarse que no tuviera fiebre  o algo por el estilo

El pequeño miró todo a su alrededor, parecía ido y desorientado

“No era un sueño” Susurró agachando la mirada, se ahogaba en su propia tristeza.

“Basta Game, no dejaré que sigas sufriendo, así o buscas a Jongwoon tú o lo hago yo” Lo amenazó, que más quería ese muchacho que volver a lo que era antes, y de cierta forma remediar las estupideces que cometió, pero… tenía miedo al rechazo del otro, aunque si lo pensaba bien todo había sucedido tan rápido, que aunque mínimo había una esperanza de recuperar todo lo que perdió.

“No lo sé Sungmin… Yesung es decidido y, tal vez no quiera volver conmigo” Ahora dudaba de poder lograrlo, era una actitud que tenía que erradicar de su ser

“Pues nunca lo sabrás si no lo intentas, ¡Tonto!” Sí era un tonto… Tonto idiota enamorado, ¿Por qué antes no sé dio cuenta de sus errores? ¿En qué estaba pensando? Y ¿Por qué sigue siendo tan inmaduro?

“L-lo haré, Min” Una imperceptible sonrisa se asomaba, pero tenía cierta duda rondándolo y haciendo que tuviera miedo “Min, quiero que me prometas algo, no le digas a nadie lo que pasó… mucho menos a mis padres, ni yo estoy seguro si el divorcio es de verdad, pero me esforzar porque no sea así, por eso no le cuentes a nadie” El mayor lo miró con los ojos bien abiertos y parpadeando simultáneamente

“Ahn, este… creo que me llaman, ahora regresó” Intento alejarse, mas una voz reprobatoria le grito

“Lee Sungmin, ¡¿A quién le contaste?!” Ahora el Evil-Kyu estaba presente

“S-solo a una persona, pero no dirá nada… espero” Hasta el mismo dudaba de la credibilidad de esa persona

“¡Sungmin! ¡¿Quieres morirte?! ¿Por qué puedo concederte ese deseo le harías un bien a la humanidad?”

“Se me pasó, lo siento… pero tu carácter cambia ¿Acaso eres bipolar?”

“¡Cállate!... Dime ¿A quién se lo contaste?” El mayor dijo un nombre casi indescifrable “¿Quién?”

“¡A Donghae! Se lo conté a él, pero no dirá nada… eso espero”

‘Demonios’ ahora si estaba perdido, ese pez boca floja, igual a alguien a su lado, se lo contaría a su hermano Henry, quienes son buenos amigos y… ¡Estaría acabado! “¡Maldición Sungmin! ¿Cómo puedes ser tan idiota? Estúpido rosado”

Era solo cuestión de tiempo, para que sus padres lo supieran y… ¡Ah! No quería ni pensar que lo que esos dos podía hacer, claro aparte de estar inmensamente felices, de seguro le presentarían un pretendiente como siempre lo hacía, claro que Kyuhyun no eligió ninguno sugerido por sus padres, porque pues era obvio, su padre es casi la mano derecha de Dios y su Omma, es extravagante, atrevido e impulsivo, varias veces se preguntaba como ese par puede ser una pareja; según las características de sus padres, todos sus pretendiente eran… Raros, ninguno llamaba su atención, pero claro sus padres quieran que Kyu se casase con alguien tan importante como él, pero nunca pensaron que hubiese sido con las personas que más detestan… O mejor dicho que su Omma detesta, no sabe realmente le motivo por el cual su Omma y su suegra se odian, parecen perros y gatos, tan insoportables que nadie las aguanta en sus momentos de rabietas, algo debió pasar, pero bueno ese no era su asunto, suspiró mirando con rabia a Sungmin, “Si hay un Dios, que me detenga porque de lo contrario a ti no te irá bien, Min” No importase cuantos ‘Disculpas’ diera Sungmin, Kyuhyun no se lo perdonaría

--♥--

Mientras tanto en algún lado de Seúl un par de chicos tomaban un poco de café en un Starbucks

“¡¿Qué?!”

“Lo que oyes, Min me lo contó, así que debe ser cierto” Volvió a tomar de su vaso.

“¿No estarás exagerando? Hasta donde yo sé esos dos se aman ¿no? Sino ¿por qué se casaron?”

“Eso también creía yo”

“Pero separarse, eso no lo creo, además fui a su boda”

“Yo también fui Hyuk, pero eso no quita el hecho de que ya todo terminó ¿no?” Dio un sorbo a su café “Es una lástima, casarse y luego separarse” Suspiró “Pero bueno aún son jóvenes y tienen una vida por delante”

“Espero que eso no nos pase a nosotros”

“¡¿Q-qué?! ¿Qué quieres decir con eso?” Casi escupe lo poco de café en su boca

“Donghae, no me digas que no quieres casarte conmigo” El mencionado se sonrojo un poco, raspó su garganta un poco y hablo

“N-no es que no quiera, -Agacho su mirada, tocar ese tema le daba pena- es solo que pienso que un matrimonio es algo serio y que una decisión no debería tomarse a la ligera” Tosió un poco “Además aún tengo cosas que vivir y no quiero terminar como Kyu, se casó tan joven y recién ahora vienen las consecuencias”

“Entonces ¿Crees que una pareja no puede casarse a temprana edad?” Algo le decía que esto no terminaría bien

“Bueno aparte de verse mal, creo que es una decisión precipitada y además…”

“Pues yo creo que eso es signo de querer pasar con la persona que amas el resto de tu vida”

“Pero y ¿Si el amor se acaba? Terminará en tragedia y no es bueno arriesgarse”

“¡No puedo creerlo! ¿De verdad crees eso?”

“Hyuk te estas alterando por estupideces”

“¿Crees que mi amor por ti es una estupidez?” Se levantó de su asiento, ciertamente no le gustaba la actitud que tenía su pareja en situaciones así, ¿por qué siempre mostrar esa negativa al momento de hablar de un tema así?

“Eunhyuk no quise decir eso”

“Donghae he tratado de entenderte, pero yo no quiero seguir siendo algo superficial para ti, ¿No entiendes que me encantas y que quiero pasar el resto de mi vida junto a ti?” Empezaba a irritar de nuevo con el mismo de tema de siempre

“N-no es el mejor lugar para hablar de esto” A este punto el escándalo que hicieron llamó la atención de la mitad de la clientela en aquel lugar

“Lamento que no compartamos la misma opinión, hablaremos después” Sin decirle nada más tomó su sacó y salió de aquel lugar, dejando a un aturdido Donghae, trató de detenerlo pero este ya había desaparecido de su alcance.

Se suponía que solo iban a tener una cita, pero resulto algo peor, odiaba cuando cosas así pasaban, ¿Por qué Hyuk tenía que ser tan decidido en este tema? Ah, es verdad, desde que ambos asistieron a la boda de Kyu, Hyuk ha estado tratando del tema cada vez que tiene tiempo, pero ¿Por qué lo hace? ¿Cuál es su propósito? Era algo incómodo para Donghae, pues él no pensaba en eso, por su mente nunca se le pasó la idea de convivir con alguien además de ser algo importante que debía ser tomado con seriedad y él aún tenía ciertas dudas que lo asechaban con respecto al casamiento, pero ¿Qué hacer? Su pareja no entendía esas inseguridades que lo rondaban, era cierto que lo amaba pero el casarse no estaba en sus planes, y pues aun no porque en su mente esta la idea de primero vivir bien tu vida y luego amarrarte a esa persona que escogiste para toda la vida.

A estas alturas de su vida ya contaba con 27 años de edad, tenía un trabajo estable, su economía era buena, tenía un departamento propio y un novio que amaba, pero con él que últimamente discutía de más. Si ya tenía su vida arreglado ¿Por qué no avanzar a un nivel superior? Ah, es verdad no estaba seguro ni de sí mismo.

Ahora se encontraba en su casa, había llegado caminado pues así pensaba más detalladamente las cosas además que lo relajaba, llegó lo más pronto que pudo a su dormitorio y seguido a su cama, se dejó caer en esta, reviso una vez más su celular para cerciorarse de tener llamadas de Hyuk, pero otra vez nada “Demonios” Odiaba cuando se peleaban así, pero era cuestión de tiempo para que lo llamará ¿Verdad? -Suspiró- Ahora se sentía el malo de la película y por “tonterías” él sabía que no tenía por qué sentirse así, pero no podía evitarlo.

Flashback

Hace tres años, exactamente dos meses después de asistir a un matrimonio

“D-donghae” Dijo con voz casi inaudible pero que llamo la atención del otro

“¿Qué pasa?” Giró a verlo, en el rostro de su novio había cierta curiosidad

“¿Algún día te quisieras casar?”

“P-pues… creo que sí” Sinceramente no había pensado en eso… hasta ahora

“¿Te casarías conmigo?” El otro se ruborizó por alguna razón aquel tema le avergonzaba en cierta manera.

“Solo porque Kyu se casó no significa que yo también lo haré tan pronto” Desvió la mirada

“Entonces… ¿No quieres?” Ok, no esperaba esa pregunta y tampoco que él pensará que no quería, no era lo que quería transmitir

“C-claro que quiero y más si es contigo –Se ruborizó- p-pero necesito tiempo para pensar en una decisión, es solo eso… Tiempo”

Al escuchar aquello, no dudó más y se lanzó a abrazar a su pareja “Para mí eso es suficiente… Te daré todo el tiempo que necesites”

Fin Flashback

Es verdad, le pidió tiempo -Suspiró- pero ¿Cuánto más tiempo debe pasar para que por fin acepte? ¿Aún no solucionaba sus conflictos internos? No, no era eso y él lo sabía muy bien –Se abrazó de su almohada- Por una parte sentía que tenía la razón y que Hyuk era el equivocado y por otra todo lo contrario él estaba equivocado y pues Hyuk en lo cierto “¿Por qué es tan complicado?”

--♥--

“Hijo ¿Es verdad?” rápidamente su mirada se posó en su Omma, no había duda que había sido él quien se lo contó “No te preocupes, verás que encontrarás a alguien mejor”

Perdón, pero ¿Acaso su propio padre le decía que Kyuhyun era alguien inadecuado para él? Si antes se sentía mal, ahora mucho peor ¿Qué no entendían que le cuesta olvidarlo Y que precisamente que se refieran a él en términos nada agradables a sus oídos le afecta? Está bien, está bien, se equivocó ¿sí? Kyuhyun no es la persona que pensó que era, pero ya detengan el querer recordárselo a cada momento, eso envés de sacarlo adelante lo hunden más…

Estaba harto de esta situación, primero su madre luego su padre y ¿Ahora qué sigue? Sus abuelos, primos y demás, todos ellos ¿se pondrán de acuerdo para echarle en cara que perdió a la persona que más amaba y que su matrimonio nunca debió llamarse “matrimonio” sino nombrarla alguna tontería de circo?

Apretó los puños y salió de aquella habitación dejando atrás a sus progenitores confundidos y alguno que otro empleado haciendo limpieza por allí, se dirigió a su dormitorio y tomó lo necesario, bajo los escalones topándose con su Omma quien al parecer lo había seguido y que ahora le exigía una explicación por aquel actuar suyo hace instantes, mas no le dio tiempo de formular tal pregunta y tampoco se tomó la molestia de darle una respuesta, pues ni bien lo vio salió con mucha más rapidez, para no toparse con alguien más, en esos momentos lo que quería era dejar esa casa e ir a donde sea pero alejarse de esa presión que todos ponían sobre sus hombros, no lo soportaba y no creía poder hacerlo alguna vez.

Al llegar a la puerta principal se dirigió a rápidamente a su auto, el que por cierto había mandado a estacionar en frente pues iba a salir, pero el que su padre queriese verlo en ese mismo momento le corto tiempo, pero ahora agradecía el haber anticipado aunque inconscientemente esa acción.

Su Omma le decía cosas, que no lograba entender, pero que al final desaparecieron pues ya había emprendido la marcha, necesitaba distraerse y desahogarse, olvidarse por un momento de su realidad.
Nota mental: “Tratar de dejar de huir de los problemas y enfrentarlos”

--♥--

“Ahora voy” Después terminar de pronunciar lo dicho, escucho pasos acercarse a la puerta, tras abrir esta un rostro conocido se asomó en medio de ella “¡Hyung! –Una sonrisa se asomó en su rostro, para luego tomar en cuenta que…- ¿Qué haces aquí?”

“¿Puedo entrar?” Preguntó intentando devolverle la sonrisa que le dio, mas luego esta se desvaneció

El menor al notar aquello, cayó en cuenta que algo grave había pasado, lo hizo pasar y cerró la puerta, le dio a tomar asiento, lo mismo que hizo él, la mirada del mayor era indescifrable, algo que solo ocurría cuando el tema era sobre:

… “Kyuhyun”…

Hubo un silencio aterrador entre ambos, nadie decía nada, uno por no saber por dónde empezar y el otro por no saber que decir en este caso.

“¿Q-qué pasó?” Por fin se atrevió a decir, necesitaba saber lo ocurrido para poder ayudar a su amigo.

“No me entienden, nunca lo hicieron y no creo que ahora lo hagan” Las frases incoherentes del mayor confundían al menor

“¿A qué te refieres?” No comprendía lo que sucedía

“¿Creen que no me duele? ¿Qué me gusta que me recuerden que no funcionó?”

“Yesung…” Ryeowook ya sospechaba a que venían todas esas palabras.

“Para ellos es fácil sentirse felices, pero yo no tengo ningún motivo del por qué sentir así también”

“Woonie no te atormentes más” Se acercó a él, no me gustaba ver a su amigo así.

“Me equivoque, sí… pero pareciera que a ellos les encanta la idea de que por fin me di cuenta del error y…”

Dejó de hablar no solo porque le sorprendió el abrazo inesperado de Ryeowook sino que el nudo que tenía en la garganta le impedía seguir hablando.

“Olvida todo ¿sí?” Lo abrazó con fuerza, en momentos como ese agradecía tener alguien en quien apoyarse en momentos difíciles “S-si quieres… Puedes llorar, no le diré a nadie que te vi hacerlo”

Él nunca lloraba pero últimamente aquella sensación de querer hacerlo era tan presente y retumbante que había perdido la cantidad de veces que lo sintió.

Tal vez estaba bien si lo hacía una vez más, aunque sea con alguien presente, está bien llorar ¿no?

¡Happy Birthday Leeteuk!

The Best Leader ♥

viernes, junio 28, 2013

Cosas sobre mí


Sobre 5 cosas de mí

Primero "Amo escribir, me fascina escribir historias de las que siempre he imaginado y que las expreso en unas cuantas palabras... es mi forma de expresarle a mis lectoras las ideas que surgen de mi mente; es por eso que creé este blog"
Segundo "Que sobre todas las cosas soy E.L.F. y eso dudo que cambie"
Tercero "Es que sueño algun día con ir a un Super Show, pero en ASIA de preferencia en Japón o quiza en el mismo Corea"
Cuarto "Tengo el corazón eternamente pintado de Azul Zafiro"
Quinto "Es que par mí siempre serán 15 hermosos hombres"

Just You [Yehyun] Parte II

Capitulo II

“Problemas”

Nuestra relación se había fortalecida, todos lo notaron, casi todo el día pasábamos juntos, ya sea por decir cosas como que quieras practicar conmigo a cantar mejor, en realidad no tenía nada que enseñarte, tu voz es encantadora y tienes tu estilo propio, en un principio me sorprendí decir eso, me pediste ayuda, yo te dije que no eres peor que yo, que practicando tú mismo lo conseguirás, me lanzaste una mirada asesina, ¿Hice algo mal?, luego me dijiste que decías eso para estar pasar más tiempo conmigo, ahora entendía tu indirecta y eso pues no me gusto, pues insinuaste que eras perfecto y que no necesitabas practicar para mejorar, un leve egocentrismo, algo que nadie te puede quitar.

- - ♥ - -

Como se había planeado envés de practicar, hacíamos otras cosas, ¡Hey! pero no piensen mal, nada fuera de lo normal que hace una pareja recién unida, ‘practicábamos’ en uno de los salones de la SM entertaiment, aunque a veces íbamos al departamento que tengo pero no uso con frecuencia, pues lo encuentro más cómodo que estar en la empresa donde estamos limitados; yo te abrazaba, reteniéndote en mis brazos, a ti te gustaba que fuera posesivo, pero no era para menos, si se trataba de ti lo veía necesario; por el momento la relación que manteníamos era secreta, nadie a excepción de nosotros dos lo sabía, todo era perfección, podía besarte cuando quería y ser correspondido por ti, era como un sueño hecho realidad, muchas veces desee que me dijeras que me amas, pero simplemente te apenaba, no me importaba pues sabía que si lo sentías, solo que para ti era extraño revelarlo, te cuesta decir lo que sientes, solo de demuestras… soy comprensivo con ese tema, no te forzaré a nada, solo esperaré paciente escuchar un día de tus labios un ‘Te amo’, ansioso espero ese día, es por eso que yo a diferencia tuya, no me calló nada que no sienta, en cada encuentro nuestro te digo un sinfín de “Te amo”, con la finalidad de darte a entender que no debes reprimir ningún sentimiento que tengas.

Tus dedos jugaban con mi cabello y a la misma vez me daban relajantes masajes, algo que me relajaba, yo en cambio te sujetaba de la cintura, de vez en cuando tocándote fervorosamente pero con otros motivos, creo que lo sabías pues en cuanto hacía eso, aumentabas la intensidad del beso, como dándome a saber que tenía permiso de… de hacer eso contigo, sonreía ante tu actitud, mi pequeño tan decidido y dispuesto, una presa perfecta… pero no, no era el momento, aún te quería virgen, paraba mis impulsos, a cada intento de llegar a más me detenía, pues es un paso grande y no necesitaba tener sexo para saber que me amabas, lo sé y eso basta, “Deberíamos regresar” sugerí, pues pasamos casi toda la tarde en ese salón… amándonos, mi sugerencia no te agradó mucho, “No quiero” dijiste con voz infantil, expresando tu molestia y alejándote de mí, con cierto resentimiento, me acerco a ti “¿Qué sucede?” expresó mi disconformidad, esta reacción tan contraria a la que hace un momento, “Es solo que, no sé qué sucederá después, solo quiero quedarme contigo y olvidar el resto”, ahora entendía esa reacción, es como un escudo que utilizas para que nadie descubra tus temores, camuflando tu verdadero sentimiento, agradecía que me dejarás descubrirte tal y como eres, que me des la confianza de ver al verdadero Kyuhyun, te tomo de las mejillas haciendo que me mirarás “¿Sabes que siempre estaré contigo?” asientes con un leve sonrojo, “Entonces ¿Confías en mí?” te dije “Sabes que si” desvías la mirada, de seguro es demasiado meloso para ti, pero para mí es algo tierno, sonrió al saber que te sonrojas por mis simples acciones, “Entonces debes de saber que no tienes que temer… Estaré a tu lado aún si me lo prohíbes” abres los ojos de par en par, estas sorprendido y no es para menos, aunque lo dije solo como ejemplo lo tomaste en serio “No, eso nunca pasará” dices algo exaltado, estaba por contestarte a no ser porque mi celular sonó en ese momento, lo tomo y notó que es Ryeowook, me preguntas quien es, no sé si decirte la verdad, pero no quiero mentirte, no a ti no… Te digo quien es, lo cual hace que tu rostro cambie de expresión, si bien te amo como un gato a tu leche, aún tengo una relación con wookie y ese tema no lo he aclarado, bajas la mirada, me siento culpable de saber que provoque de ese ánimo, “Contesta” dices aun con la mirada baja, “Debe ser importante” me sorprende, esperé algo más… inmaduro de ti, pero al parecer comprendes la situación, eso agradezco.

“Yesung-Hyung ¿Dónde estás?” dice el pequeño al otro lado de la línea

“Ahmm… -Mi mente se bloquea- con K-kyuhyun… ya sabes, practicando” me escudó, escucho una disconformidad de la otra línea “Estoy por regresar” cambió de tema.

“Oh, ¿así? Entonces te esperaré” me siento mal mintiéndole, no me gusta mentir y más sabiendo que es a un inocente como Ryeowook

“O-ok” Esa fue toda la conversación, ahora me costaba más tratar con Ryeowook, nunca debí de proponerle ser pareja, por mi inmadurez, e estupidez terminaré haciéndole daño al pequeño.

Me miras preocupado, pues ahora no solo tú sino yo también me siento mal, pero conmigo mismo, “Será mejor que nos vayamos, nos esperan” dije con una sonrisa camuflando mi desánimo, no sé si te la creíste, solo me hiciste caso, debíamos regresar a nuestra realidad.

- - ♥ - -

Al bajar del auto, ambos suspiramos, estábamos enfrente del edificio en donde ya no podríamos acercarnos como queríamos, en donde tendríamos limitaciones, te tomé de la mano, me miraste sorprendido pues estábamos ya camino por el ascensor, para ser exactos el 11 piso, intentabas soltarte mas no te daba oportunidad de hacerlo, iba a disfrutar los minutos que estemos juntos al máximo, de tanto forcejear terminaste cediendo, “¡Bingo!” pensé. Piso 3… 4… 5… sabía que faltaba unos 6 más para llegar, así que era ahora o nunca, con la mano que sostenía la tuya, te jale así acercarte a mí y para que no te resistas, coloque mi mano libre alrededor de tu cintura, así atrapándote, tu rostro era de frustración, desconcierto y pues tus ojos… me querían matar, no te di tiempo para reclamarme nada, sabía que después de lo que haría terminaría gustándote.

Un beso, fue lo que robé de tus labios, si iba a estar sin ellos por tiempo indefinido antes tenía que darles un ‘Hasta pronto’ por lo menos, y como predije te gusto, tanto que ahora eras tú el que me tenía acorralado, me empujaste a la pared del ascensor, haciendo eco en ese reducido lugar, y sacándome un quejido, ¡eso dolió! Pero a ti pareció no importarle y a mi pues, me olvide del dolor, tus juguetonas manos fueron a mi cabello, tal parece te encanta mi hermoso pelo, ambos labios danzaban entrelazándose entre sí, encajaban perfectamente, hubo saliva de por medio. Piso 8… 9… 10… Era hora de separarse pero ninguno tenía la intención de hacerlo, como fuerzas sobrehumanas te aparte de mí, no sin antes besar tu frente transmitiendo un ‘Muy pronto’ me acomodé el pelo, pues me lo desacomodaste, me miré por el reflector de mi celular, ‘Dios’ parecía que un par de gatos jugó con él, tu reías detrás de mí, con esa risa evil que tu solo tienes, te iba a reclamar pero el ascensor ya había llegado a su destino, pero lo que impidió regañarte fueron las personas que querían usar el ascensor, salí de ahí casi corriendo, seguido por ti que estabas detrás de mí ‘Te ves bien’ dijiste para luego volver a reír, te amo pero me haces unas travesuras, eso no cambiará, pero llegará el día en el que yo te trolearé, y me reiré tanto que terminaré en el piso revolcándome y llorando, con la pancita adolorida.

- - ♥ - -

Estaba hecha en mi cama, reflexionando sobre lo que debía de hacer, debía de hablar con Ryeowook, pero no sé qué decirle para no lastimarlo, ser directo será peor, pero si no lo hago será mucho peor, miró a mis tortugas, su vida es más sencilla que la mía, solo viven para comer y… no hacer nada. “Papá no sabe qué hacer” les pregunto y como tonto quedo en silencio como esperando una respuesta de ellas, “Me estoy volviendo loco” me dijo a mí mismo y ahora que lo pienso, hablo solo, estoy aún más loco de lo que pensé, ruedo por toda la extensión de la cama, tratando de como eso olvidar por un momento el problema que me aqueja, por lo visto lo tengo difícil, sé que tarde o temprano se sabrá pero lo que no sé es cuando, si supiera, me prepararía mentalmente para ese día, aunque sé que a la hora del momento tendré miedo, temor de las reacciones de los demás pero sobre todo de Ryeowook, ese pequeño no tiene la culpa de nada, ni muchos menos de cometió error alguno, el único error que tuvo fue haberme conocido, me envuelvo en las sábanas, tratando de ocultarme del mundo, algo así como hago con los fantasmas por la noche, es algo tonto pensar que un pedazo de tela me protegerá pero que al mismo tiempo me consuela,

“Hyung, ¿Estás enfermo?” dice una voz que reconozco de inmediato… Ryeowook, destapó mi cabeza y este se sienta a orillas de mi cama,

“No, no tengo nada” le digo para que no se preocupará por mí, no valía la pena hacerlo,

“¿Seguro?” insiste

“Cuando llegaste te pareciera que te atacaron” eso me recordó las miradas de los demás sobre mí debiendo pensar que me sucedió algo, ‘Maldito Kyuhyun’ (¬¬*)

“No sucedió nada, y estoy bien… Bueno no todo está bien” dije sentándome y mirándolo a los ojos, si le iba a contar era el momento,

“Pasó algo malo” dijo preocupado, tan pendiente de mi

“Verás… -Lo miré-  Un amigo mío  -‘Cobarde’- tiene pareja y junto a ella descubrió que lo bonito de una relación –Refiriéndose  Wookie- lo quiere como a un hermano menor, y tal vez confundió ese cariño con amor, pues ahora está enamorado de alguien más y no sabe cómo decirle a su pareja que no lo ama sin lastimarla… y su caso me trae tristeza… ¿Qué me aconsejarías… p-para decirle a él, obviamente?” su mirada analizaba el caso, con algo de dificultad debo decir, pues es lo me tiene patas arriba,

“Hyung, sinceramente… No sé, es difícil, tal vez si digo algo no sea lo correcto, pero creo que no debió enamorar a su primera pareja, y en cuanto a la persona que ama, no debería dejarla, digo si es que las cosas se ponen feas”


“Tienes razón, no debería… mi amigo, no yo –rio nervioso-”

Continuará...

miércoles, junio 26, 2013

No todo esta perdido [Yehyun] Cap. 1

N/A- Este Fanfic es Yaoi, asi que si no te gusta el género, por favor no sigas leyendo

Capítulo I


“He analizado su caso en estos últimos meses y he llegado a un conclusión, tal vez no lo tomen bien, pero es un sugerencias, no les estoy pidiendo que lo tomen en serio, solo que lo tengan presente, como su terapeuta les recomiendo que se tomen un tiempo… Relaciónense con otras personas, salgan de la rutina en la que están sumergidos, eso les hará darse cuenta lo que en realidad significa su matrimonio para ustedes” Ninguno de los dos se esperaba esa respuesta ¿Les pedía que se separaran? Bueno a este punto de su matrimonio no iba a ser extraño que no lo hicieran, hasta algunos pensaran que ya era hora, pues más que esposos parecían enemigos públicos.

Yesung suspiró frustrado ¿En qué momento su matrimonio llego a este punto? Últimamente se cuestionaba severamente si había hecho bien en desobedecer a sus padres y casarse con aquel pequeño de cabello castaño que se encontraba a su lado izquierdo, con el quien ahora discutía y peleaba cada vez que podía. Todo eso le daba un dolor de cabeza, que no lo dejaba tranquilo, lo aficionaba y debilitaba ¿A dónde se fue todo ese amor que en un principio se profesaban? Si acepto tomar terapia de pareja –cosa que él no haría- fue porque sus allegados se lo recomendaron diciéndole que Kyuhyun era lo mejor que le había pasado al moreno, pero sobre todo porque le era imposible reconocer que ese amor del que tanto lucho por conseguir se estaba perdiendo, ahora que lo pensaba dudaba de que él sea lo mejor que le ha pasado.

Todo este lío ocurrió cuando Yesung decidió tomar el mando de la empresa familiar, la cual le demandaba esfuerzo tanto menta como físico y parte de su tiempo, esto trajo consigo que descuidará su matrimonio, pero este no fue el único elemento que contribuyo a esta situación sino también por parte del Kyuhyun quien no asimilaba su nueva vida de casados y olvidaba que ahora tenía ciertas restricciones, llegaba tarde a casa, iba a fiestas sin decirle a Yesung que llegaría al día siguiente, etc. Aunque pensándolo bien Kyuhyun aún tenía una mentalidad infantil y rebelde, y como no tenerla si contaba con 21 años cuando se casó, puede que ese haya sido un detalle que Yesung trataba de cambiar, pero que al final no pudo con ella, fue tonto el querer cambiar a alguien, cabe decir que muchas veces lo intento y en todas siempre falló, y como era de esperarse cada persona tiene su límite y el amable, pacifista y agradable Yesung también.

Esas y más cosas trajeron como consecuencia que hoy ese par este hoy en su séptima terapia de pareja, que lo único que conseguía era que se distanciaran más, habían dos razones, o el profesional que estaba en frente a ellos no servía para su vocación o es que su relación no tenía remedio…

“Por mi está bien” Por fin alguien se dignó a romper el hielo que se había formado en ese consultorio, calmando un poco al terapeuta

Esto sorprendió a Yesung atrayendo la vista de Kyuhyun sobre él ¿Había oído bien? Por alguna razón le molesto el saber que Kyuhyun daba por muerta esa relación, ‘Pues bien si eso es lo que quiere, eso tendrá’ pensó, para luego mantener la mirada en el profesional frente a ellos.

“Pienso lo mismo, así tendré tiempo para mí” Dijo el emo, con el único propósito de enojar al Game, quien no se hizo esperar respecto a su respuesta.

“Será un alivio ya no tener que ver tu horrenda cara por las mañanas” Agregó un poco de amargura a su comentario, de verdad que odiaba que Yesung lo quisiera provocar.

Esto inmediatamente lo percibió el profesional quien paro las intenciones de ambos de seguir pelando en su consultorio.

“Señores parece que han malinterpretado mis palabras, no les he dicho que se separen, solo que se den un tiempo, por favor no lo tomen a pecho” Ciertamente estaban siendo regañados por su propio terapeuta.

Y tras darles una charla sobre lo  importante que es una relación, la comunicación, la armonía y con genuinidad en un matrimonio los dejo ir finalizando la séptima sesión, claro que ellos aún no terminaban de pelarse, y así fue ni bien llegaron discutieron.

“No puedo creerlo, ¿En serio? Era preciso decirle que si nos ibas a separar”

“No es separación, pero si así lo quieres” levanto los hombros en señal de ‘no me importa’ cosa que no le agradó nada al mayor, ¿En serio porque tenía que ser tan infantil en situaciones como estas?

“¿Tanto te entusiasma sepárate de mí?... ¿Sabes qué? si quieres hazlo no me importa, al fin y al cabo eso es lo quieres ¿no?... Siempre haces lo que quieres sin importarte los demás”

Yesung empezaba a perder lo poco de cordura que le sobraba

“No te detendré si eso te preocupa, ¡porque de la peor manera aprendí a reconocer cuando pierdo mi tiempo!”

Bueno tal vez Yesung se estaba excediendo, pero a ese punto la rabia lo cegaba

“Entonces ¿yo tengo la culpa, cierto?” Dijo el Game, un poco asustado de la actitud tan agresiva del mayor “No tienes derecho a juzgarme” suspiró “Si antes tenía dudas ahora tengo la mayor certeza… Quiero el divorcio”

Ok, esto se estaba saliendo de rumbo y a juzgar por la intensidad de la situación no acabaría bien para ninguno de los dos.

Esto obviamente sorprendió a Yesung, quien cayó en cuenta que lo que había dicho lo dijo sin pensarlo ni sentirlo, pero el que más lo sentía era Kyuhyun quien le dolió mucho escuchar las palabras hirientes del mayor y que expresaba ese sentir con pequeñas y escurridizas lágrimas que recorrían traviesas ese hermoso rostro, que ahora trataba de ocultarlas

“Kyu… Yo l-lo siento, no era mi intención herirte” Si pero lo hizo, por un momento él olvido el motivo que lo cegó y se acercó hacía el pequeño, siempre ha sido así odiaba verlo triste y como algo automático Yesung siempre quería reconfortarlo, Kyuhyun al verlo acercarse con los brazos extendidos retrocedió.

“No te me acerques, ya no quiero seguir por estupideces… En un principio lo sabía pero no quise aceptarlo, fue un error haberme casado contigo…” La cara de Yesung cambió a un seria y con cierta expresión indescifrable para Kyuhyun “Si lo piensa bien nos hubiéramos ahorrado tantos malos ratos”

Dicho eso un silencio incómodo reinaba la cocina, más el desconcierto invadía a Yesung, ¿Así acabaría todo?... Esos tres años de casados no significaron nada, y cabe decir que ninguno de ellos puso de si para mantener su relación a flote, y eso hizo que se hundiera como si nada, ambos observándolo y sin hacer nada… Sí su relación ya no era nada, ya no había nada que hacer, todo estaba… ¿Perdido?

Eso le molestaba e irritaba, sin darse cuenta fruncía el ceño mirando a la nada, sin decir nada salió de la cocina, se dirigió a la sala en donde tomó la casaca de cuero –negro como le encanta y le queda muy bien- que había dejado en el sillón principal, y junto a este las llaves de su auto, Kyuhyun al notar esta acción fue detrás de él, pero sin decirle o recriminarle nada solo observando con atención cada paso que este hacía

“¿A dónde irás?” Dijo envés de decir un ‘No te vayas’, no recibió respuesta por parte del otro, quien ya había entrado en el auto y ahora se disponía a encenderlo.

Kyuhyun no sabía qué hacer, no quería que se marchará pero tampoco tenía la intención de hacérselo saber, y una vez más por su poco valor observo desde la puerta como el mayor se alejaba, y tal vez esta vez para siempre…

Ya estaba anocheciendo, el sol se ocultaba y el cielo se teñía de un color negro azulado, era de esperarse que esa noche como muchas otras anteriores la herida brisa reinaría en unas horas, todo iba a ser como siempre, pero algo iba a dejar de ser como antes, esa noche Kyuhyun dormiría sin el calor de Yesung.

--♥--

“¿Qué hiciste, qué?” Dijo exaltado un joven de cabellos marrones y figura delgada, la verdad ese pequeño no esperaba que su mejor amigo lo llamará para decirle que acababa de terminar su relación “Y-yesung ¿E-estas b-bien?” dudaba de decirle, pues sabía que cuando este se enojaba podía ser agresivo una vez ya le paso, pero sobre todo lo pregunto porque su amigo traía la mirada perdida en su taza de café, no la bebía ni tampoco mostraba intenciones de hacerla

Él nombrado alzo la vista encontrándose con una mirada preocupada de parte de su amigo, casi hermano y simplemente dijo un “¿Ah?” en señal de no haber escuchado ni entendido nada de lo que él otro le dijo, en otras palabras se había perdido en su mundo.

“Yesung ¿No me prestaste atención?” El pequeño inflo sus cachetes

“Perdón, Wookie, pero no tengo ánimos” Volvió a pegar su mirada en aquella taza de café que desprendía sus últimas nubes de vapor.

“Yesung ¿Crees que fue buena tu decisión?”

“No fue solo mía, sino de los dos… Y como dijo él, si no nos hubiéramos casado nos hubiéramos ahorrado tantos problemas, así que… ya todo acabó y no hay remedio, Wookie”

“No sé qué decir para que estés mejor, pero te ves peor de lo que antes estabas”

“Estoy acostumbrándome a entender que no signifique nada para él, ni los tres años que pasamos juntos, ni las veces que me decía cosas lindas, ni… nada, pero creo que esto me enseña a… ah –se quejó- no sé qué me enseña pero… es una lección, eso lo sé”

“Y ahora ¿A dónde irás?”

“No me queda de otra que ir a casa de mis padres, solo por un tiempo hasta que encuentre un departamento”

“Tu Omma estará feliz de verte de nuevo en casa”

“Y más feliz sabiendo que me divorciaré, eso es lo que siempre quiso y miren, así pasará… Nunca toleró a Kyuhyun y bueno le quite una suegra que lo detesta de encima”

“Y tú también, por lo que sé tú suegra… Digo ex-suegra, siempre desaprobó que anduvieras con Kyuhyun y más cuando te casaste con él… Ahora le quitarás un peso de encima”

“Es adorable” Yesung tenía una sonrisa en sus labios “Si le quitas la mirada de asesina que tiene, y su chillona voz… Resulta adorable”

Ambos jóvenes se miraron por unos segundos para luego soltarse a carcajadas, Ryeowook no le importo su pareciera loco, lo que le importaba era hacer reír a su amigo, y también hacerle olvidar sus problemas…

--♥--

“Game ¿Game?” Él recién llegado adentraba su ser dentro de esa casa que más bien parecía abandonada, tuvo que tener cuidado al momento de moverse en medio de la oscuridad total para no tropezar ¿Dónde rayos se encontraba ese diablillo? Y lo que es más importante ¿A qué lo llamó? No entendió nada pues solo escuchaba la voz indescifrable del Game, que le pedía ir a verlo y como amigo de años así lo hizo, solo que no esperó encontrarse a oscuras…

Y se preguntaran ¿Cómo entro? Pues Kyuhyun le dio anteriormente una copia de la llave, así Sungmin podría irlo a visitar solo si Kyuhyun se lo pedía, y pues esta era una de esas ocasiones.

Se apoyó en la pared, intentando ubicar con el tacto el interruptor, hasta que logró encender aquella sala, con mejor visión subió las escaleras hasta llegar al dormitorio principal “Demonios, el Game sí que se sacó la lotería” Lo decía pues el esposo de su amigo era hijo de una de las familias más adineradas de Corea y único hijo del emporio empresarial de los Kim, el Game también, pero en ese momento sonaba más el nombre Kim que Cho, y pues su casa era grande, espaciosa, tenía adornos carísimos, además de muebles, ventanas, puertas, dormitorios, y baños muy bien amoblados. 

Su amigo le tenía envidia, pero de la buena, sabía que ese adicto a los videojuegos, le había hecho muy bien el haber conocido a alguien como Jongwoon, hasta en reiteradas veces había escuchado de parte de su amigo que Jongwoon es lo mejor que le haya pasado y se daba cuenta de lo feliz que era su amigo al lado de ese hombre, claro que habían peleas, todos las tienen, pero sabía que entre ambos había algo tan fuerte que no podría romperse con nada.

“Game” Por fin había llegado al dormitorio principal y se adentraba en ella “¿Game? ¿Dónde demonios estas?” Dijo haciendo lo mismo que había hecho abajo, encontrar el interruptor, y viendo en aquella cama un bulto envuelto en sábanas, intentando ocultarse “¡Game! Deja de esconderte” Se acercó hacia él quitándole de una las sábanas y viendo que su amigo tenía los ojos rojos, y en sus mejillas húmedas de tanto haber llorado “Kyu ¿Qué tienes?”

El menor al ver a su amigo a su lado, no dudó mucho y lo abrazó, confundiendo más a su rosado amigo, y sollozando en hombro.

“Game, ¡Kyu! ¿Qué te sucede?” No entendía que había pasado para que su amigo este así, empezaba a preocuparse

“¡L-lo arruine, Min!” Dijo casi inentendible, sin despegarse de su amigo.

El conejo comenzaba a inquietarse, pero no había caso hablar si no antes tranquilizaba a su amigo, lo acarició tratando de reconfortarlo, y dándole palmaditas en la espalda como si un niño pequeño fuera.

Después de unos minutos casi eternos para Min, Kyuhyun se tranquilizó y el conejo pudo alejarlo un poco notando que algo grave había pasado, y fuera lo que fuera mataría a quien provocó tal estado en su amigo.

“Kyu ¿Qué pasó?”

“Yo… no supe que hacer para que no se vaya” No podía evitar derramar unas lágrimas “Sungmin, él se fue”

“¿Quién? Te refieres a ¿Jongwoon? ¿Por qué, que pasó?”

“Hoy, después de esa estúpida terapia” Se secaba torpemente las lágrimas, en cierta forma eso hizo reí un poco al conejo, sabía que el Game odia ir a terapia de pareja “Yesung y yo peleamos” Él mayor lo miro reprobatoriamente, sabía que su amigo no era ningún santo y que su don era provocar a los demás, pero aun así lo quería con todo y maldad “Y… dije cosas que ni sentía, me dolió mucho cuando me dijo cosas horribles” Ok, ahora si Min tenía la cara seria ¿Jongwoon gritarle a Kyu? eso sí estaba raro “Y terminó yéndose”

“Kyu, sé que se le pasará” Intentaba darle ánimos “Verás que regresará”

“No Min, no lo hará” Sus ojos se volvían a llenar de lágrimas

“Si lo hará, él te ama, lo sé además…” No terminó de hablar pues el menor se le adelanto

“Le pedí el divorcio” Agacho su cabeza, intentando ocultar el mar de lágrimas que resurgían de sus ojos.

“¡¿Qué?!” No podía creerlo, de verdad el Game había hecho algo tan tonto “P-pero ¿Por qué?”

“No pensé en ese momento de mis acciones, Min…”

“¿Por qué no impediste que se fuera?”

“N-no pude” Volvió a llorar “No quiero divorciarme… Cometí un error, Min”

Kyuhyun se veía tan frágil en ese momento, Sungmin volvió a abrazarlo, calmando su llanto, mucho daño se hacía el pequeño en recordar, acarició su cabeza, pensó que en su otra vida había sido un madre muy sobreprotectora.

Sungmin se quedó con Kyuhyun hasta que se durmió, prefirió verlo durmiendo que verlo llorar, esa noche se quedaría a dormir con el Game para hacerle compañía.

--♥--

Suspiró antes de dar unos pasos, hacía mucho tiempo que no volvía, nada había cambiado, todo seguía igual, a excepción del inmenso rosedal que detrás de él a unos cuantos metros se hallaba, eso era nuevo, sonrió pensando que de seguro era a causa de su Omma, siempre gustándole las rosas, “Nota mental para el día de las madres regalarle un inmenso ramo de rosas junto con una mascota”

Se sintió extraño, estar parado frente a esa inmensa puerta de rejas lo intimidaban, sinceramente nunca le gusto ese tipo de puertas, presumían demasiado el estatus social en el que vivía, prefería vivir en una casa normal, como en la que vivía, claro que la palabra normal se alejaba demasiado a lo que en realidad era su casa.

Tocó el timbre de enfrente, luego de unos segundos una voz salió del aparato transmisor, diciéndole que dijera su nombre y el asunto que quería, este dio su nombre e inmediatamente la persona en la otra línea se disculpó al hablarle tan groseramente –según el empleado- al hijo de sus amos.

“No, no se disculpe, suele pasar, pero puede hacer algo para que olvide lo ocurrido” El empleado gustoso acepto “No le diga a mis padres que estoy aquí… Quiero darles una sorpresa”

Bueno en realidad lo hacía, pues quería ahorrarse los sermones, agasajos y sobre todo el alboroto que hacen sus padres siempre que va a visitarlos, entro a su auto y manejo hasta el parking de la mansión, bajo de ella y entro a la mansión, se sorprendió al ver que algunas cosas habían cambiado desde la última vez que estuvo ahí, pero no lo hizo solo, sino que en ese entonces iba acompañado de… él.

Sin decirle nada a nadie más, se dirigió a su dormitorio, sin que nadie lo viera, o lo atacarían con preguntas que sinceramente él en este momento no tenía ánimos de responder, aunque sabía que lo haría en cualquier momento, tal vez mañana, pero hoy solo quería asimilar todo, pues saber que Kyuhyun ya no estaría más en su vida, le afectaba.

Al entrar en su habitación se alegró de ver todo lo había dejado en su última visita, se sentía tan cansando no solo mental sino físicamente, se cambió de ropa y se recostó en esa cama, miró el reloj de noche, eran las 0:07 del siguiente día, sabía que tenía que dormir pues su cuerpo se lo pedía, pero simplemente no podía, se acomodó de costado, mirando el vació que no podía llenar en esa cama, le hacía falta alguien, le hacía falta Kyuhyun.

Secó esa escurridiza lágrima que recorrió su mejilla, suspiró frustrado, de verdad que odiaba esa situación “Parece que no solo tendré que dejar esa casa sino también está” dijo mirando la nada, odiaba el hecho de tener recuerdos de Kyuhyun y él en esa habitación “¿Por qué no simplemente me dejas y ya?” Dijo cerrando los ojos, sabía que tenía que olvidarlo y seguir su vida. Kyuhyun había asimilado la futura separación tan bien, que cree que él también lo hará…

“Ya ninguno de los dos volverá a hacerse daño,
Dejaremos de ser Yesung & Kyuhyun,

Y solo seremos… solo Yesung… solo Kyuhyun nada más”

Just You [Yehyun] Parte I

Capítulo I

"De amigos a... amantes”

Todo comenzó por diversión, para ambos era un juego, solo eso, si queríamos molestar al otro siempre jugábamos a intimidar al otro, ya sea hablando melosidades sobre una imaginaria relación entre ambos o acercándonos más de lo debido claro que nunca llegaba a nada más que un simple intento, si uno retrocedía era victoria para el otro... Y de eso se trataba nuestra vida, llegué a darme cuenta que ese juego dejó de serlo el mismo día en que nos besamos, no podía creer lo que hacíamos y mucho menos asimilar que tú también lo hacías, lo más sorprendente fue que no fueron uno ni dos sino tantos que ya perdí la cuenta , en donde fuera, a cualquier hora, cada vez que queríamos besarnos nos ocultábamos de los demás y nos perdíamos en los labios del otro, sabía que era una completa locura, tú eres el Maknae y por ello todos cuidaban y estaban pendientes de ti y si se llegaban a enterar de lo que hacíamos a mí no me iría bien, pero lo peor de eso no fue el hecho de que él que saldría perdiendo fuera yo ni mucho menos de los besos sino que nos dábamos cuenta que lo que hacíamos estaba mal, ambos teníamos pareja, yo a Ryeowook y tú a Sungmin. Recuerdo cuando Ryeowook me hizo una escena de celos, pues yo era cercano a ti, me di cuenta que descuidaba esa relación que tanto esfuerzo me costó conseguir, sabía que esto o lo que Fuera que tengamos debía terminar, te dije que debíamos de parar  estuviste de acuerdo conmigo y así quedamos como solo amigos, eso éramos ante los demás y ante nosotros mismos.

- - ♥ - -

Fue un día como cualquiera donde algo extraño y negativo  nacía dentro de mí, ver que besabas a ese conejo no me agradó en lo más mínimo, pero no era para menos eran pareja y eso hacían las parejas, dos sentimientos completamente opuestos me embargaban por un lado me sentía aliviado pues todo parecía haber regresado a como era antes y por el otro quería alejarte de ese conejo loco, pero termine no haciendo nada solo me aleje antes de que la furia que sentía me ganara, sin darme cuenta mis pasos rápidos y apresurados me llevaron a la cocina en donde ahí visualice a unos metros a Ryeowook quien al verme en ese estado se acercó a mí y me preguntó preocupado que me sucedía, no tenía ánimo de responderle y sabía que si en ese momento le respondía terminaría peleándome con él, por eso me limite a actuar, solo le dije que me sentía cansado, este me abrazó y yo me deje abrazar sin responderle el abrazo, no, no tenía ganas, escuché unos pasos y acompañado de ellas unas voces entre ellas una que reconocí, era.  Kyuhyun y lo más seguro es que estuviera con Sungmin, los pasos cada vez eran más cercanos sin previo aviso tomó de la cintura de Ryeowook y lo besó, con todo ese arrebató e impulso que sentía, luego de un rato los pasos se detuvieron y minutos después una voz chillona grita el nombre de Ryeowook y mío,  no le tomo importancia solo seguía besando al pequeño y acercándolo más a mí,  hasta que el mismo Ryeowook separó el beso, se notaba lo sonrojado y apenado que estaba , dirigí mi mirada a Kyuhyun y noté que me miraba con enojo, se notaba ofendido, un sentimiento dentro de mi esperaba esa reacción... Nunca creí que después de eso todo se volvería más complicado.

Desde ese entonces, todo se volví insoportable, ahora competíamos por ver quien besaba mejor a su pareja, con el único propósito de sacarle celos al otro, claro que no nos dimos cuenta que lo hacíamos inconsciente pero muy intencionalmente, y de eso se basaba ahora nuestra relación, en ver quien caía primero, en ver quien se rendía primero, ambos tercos no nos dábamos cuenta del daño que hacíamos, no nos dábamos cuenta en lo que nos convertíamos; en una de nuestras tantas reuniones con los demás, a esas que a veces hacemos para librarnos de la tensión de ser Idol, en una de esas… No recuerdo como pero me encontraba contigo a solas, no había nadie alrededor, solo estábamos los dos, hablábamos como viejos amigos, era cómodo conversar de esa manera, pero esa noche toda cambió, para ambos… Te observaba, tu hermoso rostro, no podía apartar mi vista, simplemente me deslumbrabas, estaba hipnotizado ante ti, tus labios se movían, no sabía que decías, y no me importaba, era increíble sentirme estremecido, ver como el llevabas el vaso a tu boca, y que el vino tocará tus labios, llegué a pensar que lo hacías para provocarme, me sentía perdido, asfixiado ante tu mirada, era demasiado, para mí, dejé a un lado el vaso, y te mire con el propósito de que también hicieras lo mismo, cosa que hiciste pues poco a poco acortaba la distancia que nos separaba, noté que retrocedías a cada paso que daba, hasta que dejaste de hacerlo, pero no porque querías enfrentarme y que dejará de mirarte tan intimidadoramente sino que chocaste con la pared, ahora te tenía acorralado, buscaba en tu miraba un signo de aprobación o algo que me dijera que siga, pues por dentro me carcomían las ganas de capturar esos labios carnosos, algo me decía que tenías miedo, pero miedo a ti mismo, de seguro que te dejarás llevar por lo que sentías, pero eso solo me impulsaba a hacerlo, con lentitud, me fui acercando a tu rostro, iba despacio pues si no querías que lo hiciera te daba la oportunidad de rechazarme e irte de ahí… Pero como predije no lo hiciste, sino que seguías ahí, lo sabía en tus ojos, me quería y yo a ti, aunque no está cien por ciento seguro, quería oírlo de tus propios labios, “Kyuhyun, yo no haré nada que no quieres” le dije a escasos centímetros de sus labios, puede que si quieras que te besará pero me sentiría mal si solo eso quisieras de mí, no obtuve respuesta tuya, eso me dio a entender que lo que estaba intentando hacer era un error, me alejé pues no quería verte, sentía que todo está telaraña la había tejido yo mismo algo que creía era de ambos, me sentía un idiota, me disponía a dejar ese lugar pero “Hyung” me dijiste, tu voz me erizó el cuerpo, dejé de moverme, solo te observaba ¿Qué era lo que quería de mí?, sin aviso alguno, terminó estampando sus labios contra los míos, se aferraba a mí, teniendo la intención de no dejarme…

Un beso, uno tan deseado por ambos, uno que desde que dejamos de hacerlo era anhelado con fuerzas, te abrasé, con la misma intención no querer soltarte, nos besábamos con toda esa intensidad que teníamos retenida, me dejaste apoderarme de tu boca, me dejaste con solo un beso que no era el único que sufrí con la tormenta de sentimientos encontrados que me abrumaban ‘¿Cómo pude vivir sin tu sabor?’ pensaba pues ahora que te volvía aprobar me di cuenta lo dulce, delicioso y obsesivo que eras para mí, ahora me sentía condenadamente feliz, tenía lo que quería y que antes no conseguía tener, es por eso que anteriormente andaba enojado, por lo que fuese terminaba mandando al demonio lo que fuese y a quien fuese, y también con esa actitud buscaba en Ryeowook lo que tu tenías, esperanzado en encontrarlo pero siempre fallando y errando de nuevo; ahora que estabas a mi lado me inundaba un sentimiento de gozo, te acercaba más a mí… muy, pero muy pegado de mi quería que estuvieses, así poder saber lo que sientes, lo que te asusta, lo que te alegra, quería conocerte, saber porque te comportas así que causa tus desdichas y alegrías, aprender de las debilidades y fortalezas de Cho Kyuhyun, pero sobre todo saber si me amas tanto como lo hago yo.

Con fuerzas sobrehumanas me separé de ti, apreciando un leve sonrojo en ambas mejillas tuyas, aún tenía que comprobar algo, algo que era necesario para mí, sin eso no iba a estar tranquilo, “Kyuhyun… ¿Me amas?” dije siendo directo, mi felicidad colgaba de un hilo, si me decías que si iba a ser el hombre más feliz del mundo, pero si era lo contrario me destrozaría en un segundo, mi pregunta obviamente te sorprendió pues lo veía en tu mirar, intuía que buscabas las palabras adecuadas para… ¿Para qué?, tenía dos posibilidades: la primera era ser rechazado y la otra era ser aceptado, tu indecisión me frustraba, hasta que por fin hablaste “No sé si sentirlo es lo correcto –refiriéndose a la enredada situación de ambos-… Solo sé que no puedo estar lejos de ti” sonreí, y te abrasé para mí eso era suficiente, sé que tenías miedo igual yo, pero están a mi lado no volverás a tenerlo, nuca más… Siempre estaré para ti, cuidándote, amándote, porque para mí solo puedes ser tú… Solo tú

Continuará~

martes, junio 25, 2013

One-shot Yaoi

Intento Fallido [Yehyun]

El incansable e insistente despertador, sonaba obstinada mente, hasta lograr su único fin despertarlo de golpe, aunque este seguía recostado pues el día anterior fue muy agotador y cansado para él, rodó por su cama hasta llegar a un extremo de este, para quedar boca abajo, con una mano intentaba o eso parecía pues lo hacía sin ganas, apagar aquel molestoso aparato. Intento volver a dormir tratando de acurrucarse con su sábana, pero ya no podía, había perdido el sueño, ese día había planeado quedarse dormido si es posible una semana entera o más, no le quedo de otra que levantarse, pues le aburriría estar echado sin hacer nada, no sin antes maldecir al inocente despertador que solo cumplía su función, su celular sonó, era un mensaje de su amigo, el cual decía: “Oye Kyuhyun recuerda que hoy me tienes que acompañar, no lo olvides ^.^”-se encamino hasta el baño, pues ayer había bebido mucho jugo de manzana tal vez en exceso, al regresar paso por el pasadizo el que ya conocía de memoria, pues estaba en un apartamento propio compartido con su hyung, al pasar por ahí no pudo evitar mirar aquella puerta color caoba en la que siempre entraba, hecho un vistazo al reloj de pared más cercano, notó que eran las 6:15 AM, “Aún es temprano” pensó mientras en su rostro se dibujaba una sonrisa maliciosa, no lo pensó mucho y ya su ser se adentraba en aquella habitación, con cuidado de no hacer ruido junto la puerta y se dio la vuelta para observar a su “presa” aun durmiendo, se acercó sigilosamente a su cama, aquella en la que en varias oportunidades había visitado y hasta dormido en ella, un bello durmiente ya hacia pernoctando en ella, el otro tenía que admitirlo, su “presa” era salvajemente sexy, aun si dormía, en su mente malévola había planeado su venganza a su hyung, por haberlo dejado sin poder caminar un día entero acompañado de un inmenso dolor en su parte trasera, en aquella ocasión su “presa” se volvió un tosco aunque tenía que aceptarlo le gusto, lo disfruto, lo deseo…
Su plan era seducir a su hyung hasta dejarlo demasiado excitado y en el momento del hecho, dejarlo con su despierto “amiguito”, se lo va a tener bien merecido. Por un momento dudó ¿Qué pasa si su plan no sale como lo espera? O ¿si no puede contenerse y dejarse llevar por los mimos de su hyung? O peor aún no poder controlar a su hyung, pues su hyung es más fuerte que él y aunque pusiera fuerza o no, si no tenía la mente fría se dejaría llevar por él. Sí, eso tenía que hace, tener la mente fría, pensar muy claro su objetivo. Sin pensarlo más, se introdujo bajo las sabanas del mayor, el cual dormía de costado, dándole la espalda a su dongsaeng, el menor deslizo una mano por la cintura del mayor, pero este ni se inmuto, se adentró aún más hasta llegar a su pecho, delineando con sus dedos su formado pecho, este acto no tardó en hacer su efecto, pues los fríos dedos del menor hicieron contacto con la tibia piel del mayor, este despertó dándose la sorpresa de un “intruso” en su lecho, rápidamente se dio la vuelta, pero ni bien vio quien era, este otro aprovecho para quedar encima de su “presa”.
-Kyu ¿Qué hace…? –No termino de hablar al sentir esos labios suculentos besando exigentemente los suyos-
Quedo helado por un momento, pues Kyu no era normal ver a Kyu seduciendo, siempre que tenían intimidad, era él el que llevaba el papel de seductor. Esta ocasión era diferente o especial, no importa cuál era la razón su baby Kyu se le estaba regalando en bandeja de plata y no iba a desperdiciar esa mañana. Yesung correspondió al beso y caricias de Kyu. El menor introdujo  sus manos por debajo del polo ligero del mayor, volviendo a sobar, tocar, acariciar la ahora ardiente piel de Yesung mientras que las del mayor tocaban las caderas del otro, llegando hasta el borde de su pantalón de pijama intentando adentrarse en ellas. Kyuhyun reaccionó rápidamente, esto se escapaba de sus manos, dejo lo que hacía para sacar las manitas de Yesung de sus nalgas.
-¿Qué pasa? –Pregunto un desconcertado emo- ¿No te gusto?
-Yo…-Kyu sabía perfectamente que mentiría si dijera que no le gusto, pero tenía que decir algo para justificar su acción sin revelar sus intenciones- Es que… vas muy rápido hyung.
-¿Rápido? Pero si tú eres el que entra a mi habitación sin previo aviso a hacerme el amor… ¡en la mañana! ¿¡Y dices que yo soy el rápido!? –Sonrió ante el avergonzado rostro de Kyu, era tan adorable ver a su dongsaeng sonrojarse, llevo uno de sus manos al rostro de su Baby Kyu y lo acarició, reconfortándolo- Bueno, me voy a duchar –Bajando a Kyu de encima de él, echándolo a su costado y dándole un beso cálido en la frente-
El menor se quedó desconcertado, su plan falló, ¿Qué podía hacer?, no quería que se vaya, quería que terminara lo que empezó o mejor dicho lo que él había empezado, tomo de la muñeca a Yesung, no lo dejaría irse, lo acercó hasta él, nuevamente lo besó con mucha necesidad, “Que importa la maldita venganza, quiero que me hagas tuyo Yesung” pensó mientras lo tomaba del cuello y lo atraía a él, haciendo que este caiga encima de él, Kyu abrió sus piernas para que Yesung se acomode en ellas, mientras se dejaban llevar por sus deseos. Entre caricias se fueron despojando de sus prendas, fue fácil para el mayor quitarle el pijama a Kyu, tirándola por donde cayera, lo mismo hizo el menor, Yesung manoseó sin pudor a Kyu, tocándolo con desesperación por donde sus manos lo guiaran, dejó de besarlo para atacar su cuello, dejándole marcas a Kyu, quien gimoteaba ante sus roces…

[Horas después]   
Eran aproximadamente las 11 de la mañana, a esa hora el sol ya desprendía su grato calor, los rayos del sol cayeron en su rostro, haciéndolo abrir sus ojos, rodó por su cama para que no le lleguen los rayos de luz, quedando boca abajo, su rostro se escondía en su almohada, esta tenía algo extraño, olía a… al shampoo de… ¿Yesung?, de golpe alejo su rostro de la almohada y se dio cuenta que no era suya, sino la de Yesung… Se sentó de golpe, sintió un leve dolor en su parte trasera y se dio cuenta que estaba desnudo y solo, con una sábana tapándolo, miro su alrededor, dándose cuenta que no era su habitación sino la de…¡Yesung!. Por un momento se olvidó del por qué está ahí y además de eso, ¿Qué pasó? ¿Qué hizo?, al formulas estas preguntas encontró respuestas para cada una y recordó que hace unas horas hizo el amor con Yesung, se sentía tan idiota por no haberse controlado “Malditas hormonas”, maldecía por no haber cumplido su “venganza”, todo se volteo a favor de Yesung “Aish”, renegaba mientras inconscientemente pataleaba como si fuera un niño chiquito, esa actitud en él no iba a desaparecer nunca.
- ¡Maldito! ¡Te saliste con la tuya! -Dijo a la nada, descargando su enojo en… nada- Te aprovechaste de mi
- Te equivocas -Dijo una voz grave a una distancia prudente de él la que conocía perfectamente, esto hizo que diera un brinco- Yo no fui él que se escabullo en mi cama a provocarme
El menor con temor dirigió su mirada a aquella persona ¿Lo había escuchado? bueno eso era seguro y ¿Ahora que haría?, la mismo instante de encontrarse con aquella mirada tan profunda escondió su rostro con ayuda de las cobijas “Demonios” odiaba cuando Yesung tenía esa mirada tan seria y atemorizante.
Al tener la mirada bloqueada no pudo saber que lo que hacía Yesung, pero este tampoco hacia ruido alguno “Demonios, ¿se habrá ido?” pensaba, no queria arriesgarse por lo que no bajo la cobiza de enfrente de su rostro para no verlo, en cierta forma le avergonzaba lo que había pasado.
Luego de unos segundos pudo escuchar pasos que obviamente se dirigían hacia él, a cada paso su rostro se ruborizaba más y se sentía tan tonto actuando de esa manera, en un solo segundo aquel pedazo de cobija que le cubría el rostro fue arrebatado de sus manos, y lo dejó al descubierto.
Unas manos atraparon su rostro haciendo que se miraran solo unos instantes para después besarlo, Kyuhyun trató de alejar a Yesung, pero este se lo impedía.
- ¡Ah!… ¡D-detente! -Dijo cuando tuvo la oportunidad de separarse un poco- 
Al mayor parecia no importarle los reproches del menor, este solo lo seguía besando hasta que Kyuhyun desistió de seguir forzando, ¿A quién quería engañar? Los besos de Yesung siempre le gustaran y eso no puede negarlo, ni él ni su propio cuerpo.
Ambos bocas danzaban al mismo compás e intesidad, Yesung se fue acercando más a Kyuhyun hasta quedar encima de él.
- ¿No recuerdas lo que pasó? -Con el rostro rojo como tomate negó- Te haré recordar lo que hicimos -Volvió a besarlo-