Mostrando entradas con la etiqueta #Fic. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta #Fic. Mostrar todas las entradas

lunes, enero 13, 2014

Por un minuto de ti [YeHyun] Cap. 3




Oh sí y sigo aquí, veo que este fic gusta mucho por lo que lo actualizo muy seguido, y por ello los capítulos que he publicado estan alcanzando a los que voy avanzando, pienso severamente en hacerles sufrir kkk... Y también dedicarme a terminar mis demás One-shot, que por cierto ya no publico uno :c ... Un día bombardearé el blog de muchos shot :D

Bueno, a leer~


Acto 3


- ¡Aléjate de Jongwoon! –Soltó de una-


Su vista era algo extraña, como si tratará de hacerse el fuerte, intentando intimidarlo, aunque se notaba que se esforzaba para que Kyuhyun creyera eso, en cuanto al otro asimilaba lo dice por la persona frente suya, ¿Una broma? Si no es eso entonces “¡¿Qué demonios es?!”


- ¿Perdón?... ¿Quién eres para decirme eso? ¡¿Quién eres para decidir algo como eso?! –Estaba perdiendo el control, siempre que se trataba de Hyung era así-  Además ni siquiera te conozco, no entiendo porque ese odio contra mí

- No tienes que entender nada, solo que te apartes de él… ¿Quedó claro?

- Er… -“¿Qué demonios le sucede?”- Mire yo, no tengo tiempo para jueguitos –“Contrólate Kyu”- … y si quieres saber si me alejaré de Yesung –“Oh no, otra vez”- ¡¿Por qué tendría que hacerlo?! –Le enfurecía que este le dijera cosas como estas ¿Qué le importa?- ¡No lo haré! –Y recién ayer decía lo contrario, que irónico-

- ¡Me gusta! Por eso no dejaré que juegues con él

- ¡¿Qué?! ¿Jugar? ¿De qué hablas? Yo no juego con él, es mi amigo no entiendo porque dices estas cosas

- Es claro que lo negarías…  -Dio media vuelta- Volveré a repetirlo para que lo tengas presente ¡Aléjate de él, es mío!


Y antes de poder reclamarle algo, este desapareció por arte de magia, quiso seguirlo para gritarle unas cuantas groserías pero cuando se encontró en el pasillo no había nadie, todo vacío sin pistas de alguien, era rápido ese enano.
Con rabia se encerró en su oficina, azotando la puerta tras de sí llamado la atención no solo de su secretaria sino también de los demás empleados que transitaban cerca de ahí.


- ¿Qué? ¿Alejarme? ¿Quién se cree para decirme eso a mí?... ¡¿Con que derecho?!


Era oficial, estaba irritado, botando espuma por la boca, cualquier persona que se le acerque definitivamente morirá en sus manos.
En esos momentos su secretaria se asoma por la puerta, de seguro para saber si se encontraba bien, pobre no sabe que si intenta hablarle terminara quemada por el fuego que lanza la boca del Maknae,


- Señor hay un recado para usted de parte de…

- ¡No me interesa! ¡Lárgate!

- Jefe, es que me dijo que era import…

- ¡No me importa si es el mismísimo papa solo déjame solo! –Dio un golpe al escritorio tan fuerte y estruendoso que ahuyento de una vez a la secretaria-

“Demonios estoy perdiendo los papeles por culpa de ese… -No recuerda su nombre- ¡ese enano!”
Contenía sus ganas de coger algún objeto y romperlo justo como quisiera hacer con ese enano ¿Cómo se atrevía a juzgarlo sin siquiera conocerlo? Sin duda era lo que más le irritaba –Era inevitable pensar en esa pelea- “¿Le gusta? Ja nunca te hará caso, ENANO” apretaba sus puños, reprimiendo sus impulsos de gritar, pero luego analizo lo que pensó… “Nunca te hará caso” –Una daga en el corazón dado a sí mismo- ¿Por qué siempre decía cosas de las que luego se arrepiente de decirlas? “Maldición” se cruzó de brazos odiaba ser lógico y saber que él mismo estaba en ese “Nunca”

Ahora más que enojado, estaba irritado y fastidiado consigo mismo por decir tonterías que son verdaderas.

Sin darse cuenta estaba hecho un manojo de emociones, unas positivas y otras negativas, primero se mentaliza para guardar distancia con Yesung y no seguir engañándose luego viene ese enano y le hace decir cosas que ayer no hubiera pensado decir, tal vez el saber que alguien pudiera quitarle a su Hyung hizo que quisiera quedarse a su lado con mucha más razón.
Saber que casi lo pierde lo volvió loco, un sabor amargo degustó por su boca, es casi lo mismo que sintió cuando tuvo que irse y… Alejarse de Yesung. Otra vez esa sensación tan frustrante, algo difícil de describir…


--♥--


 - ¡Tienes que tomarla! –Le acerca la cuchara-

- No quiero –Gira la cabeza rechazando tomar aquel contenido-

- Pues no me interesa si quieres o no, lo tomas sí o sí

- Sabe horrible… No lo tomaré –Se cruza de brazos-

- Ja, ahora la señorita “Ya soy grande” se reúsa a tomar medicina, porque le da asco… Sí que has madurado -Sarcasmo-

- Cállate -Avergonzada-

- Ok, no lo tomes… Muérete sola

- ¿Qué clase de padre le dice eso a su hija?

- Uno que no aguanta sus berrinches –En esos momentos suena el timbre- Yo iré a ver mientras tú, te tomas eso –Le advirtió-

Con cuidado y esquivando las cosas que se encontraba regadas por el suelo “Aish, debo limpiar…” llegó hasta la puerta, abriéndola y topándose con una sorpresa nada esperada.


- Presidente Kim ¿Qué hace aquí?

- ¿Cómo que, qué hago aquí? Vine a ver a mi nieta por supuesto… -Entró sin aviso- El secretario Kim (Ryeowook) me avisó del estado de Hiyori

- Es extraño verlo por aquí, nunca ha venido a mi casa –Se cruzó de brazos recargándose en la puerta-

- Bueno siempre hay una primera vez… -Hecho un ojo al lugar- Y por lo que veo no te va bien

- Si vino a criticar créame que no estoy de humor para escucharlo… -Siempre siendo tan irreverente- … pero si vino a ver a mi hija puede ir –Señalándole el lugar-

- Gracias –Como todo un caballero guardaba compostura aunque por dentro quiera asesinar al personaje frente suyo-


Y es que esa “rivalidad” si se puede decir, creció entre ellos por tener puntos de vista con una abismal diferencia, aunque antes no era así, pues si bien cuando Jongwoon entró a trabajar a aquella empresa se destacó muy bien llamando la atención de la cabeza principal, y tratándolo así como el hijo que nunca tuvo, tiempo después Jongwoon se enamoró de su única hija y el resto es historia, cabe decir que fue gracias al señor Kim quien le presentó a su hija y así tener asegurada una vida prospera, pero luego surgió lo de su muerte y todo se complicó…


- Sigue siendo el mismo… -Se disponía a subir cuando volvieron a tocar la puerta-


Sin más reparos se acercó a la puerta principal y abrir esta. Se sorprendió cuando vio a un joven unos años menor que él, agitado de seguro por correr, este tratando de recobrar su respiración, sonrió al reconocerlo, por lo menos las visitas no serán tan desagradables…


- ¿Acaso corriste una maratón? –Se burló al verlo lo rojo de su rostro-

- ¡N-no… te burles de mí, Jongwoon!

- Lo siento –Tratando de no burlase- Entra, Ryeowook –Ambos entraron- ¿Y a qué se debe tu visita?

- P-pues no tenía nada que hacer así que vine a verte… o sea a Hiyori -Nervioso-

- Que bien -Sonrió- pero debo advertirte que con ella ahora se encuentra su abuelo…

- ¿Qué? -Sobresalto- ¿El presidente?… pero él nunca… o sea es imposible, te detesta

- Lo sé, también no pude creerlo, pero al parecer se le ablando el corazón… eso o es que la vejez le afecta…

- Ah… hoy por fin vi a tu amigo de infancia

- ¿Kyu? –Se le iluminó el rostro- ¿De verdad?... -Suspiró- Que pena que no pude ir…

- Parece que estimas mucho a ese dongsaeng

- Es mi amigo desde hace mucho, por supuesto que lo quiero –Una sonrisa apareció en su rostro-

- Es lo que pensé –susurró para sí mismo-

- ¿Te parece si me ayudas a preparar algo? –Dijo el mayor sacándole de sus pensamientos-

- Esta bien -Sonrió-


Y así se dispusieron a preparar alguna meriendo y de pasó ordenar un poco el lugar, Ryeowook pensó que por su cada paso un catástrofe o algo parecido, pues habían cosas regadas por el piso, pensó que le presidente lo notó y tal vez se haya enojado con él por tener el lugar un desastre aunque no debería de exigir nada pues él no era precisamente un abuelo “preocupado” por su nieta, si bien la quería era raro verlo tomar la iniciativa para querer pasar un rato con ella, su conducta era algo extraña, podía cambiar de la noche a la mañana.


- Espero que me pagues –Dijo el menor mientras preparaba una merienda-

- ¿Eh? ¿Y por qué? –Decía en la sala-

- Me haces cocinar y luego limpiar tu casa, no soy tu sirviente –Hizo un puchero-


Esto ocasionó que el mayor soltará a reír, era cierto que se aprovechaba de la buena voluntad del menor, aunque eso no fue lo que en realidad le dio gracia sino el imaginarse la cara de frustración de su dongsaeng


- Lamento esto, pero ya pensaré en cómo pagártelo ¿De acuerdo? -Dijo-

- Sí solo me tuvieras en el pedestal que tienes a ese dongsaeng tuyo -Dijo en un susurró para sí- … Sería la mejor paga…

- ¿Dijiste algo? –Dijo detrás de él-

- ¡Ah! –Dio un saltó- ¿Qué haces? –Sus latidos se aceleraron al igual que la idea de pensar que haya escuchado algo- Casi me matas del susto… -Dijo con obvio nerviosismo-

- Lo siento, una mala costumbre que tengo… Pero ¿Dijiste algo?

- N-no… -Al parecer no había escuchado nada, mejor así- pero ¿Qué haces aquí, no deberías limpiar?

- Es lo que estaba haciendo pero luego recordé que tenía por algún lado de la cocina un aromatizante –Dijo para luego acercase a uno de los cajones de un mueble- Aquí esta –Dijo sonriente de haberlo hallado- Bueno me voy a seguir…. Por cierto, ¿No se está quemando eso? –Señalo lo que el menor estaba sofriendo-


De inmediato Ryeowook cayó en cuenta de lo que preparaba dándose cuenta que era verdad lo que el mayor le decía, así que apagó la estufa, también pensó que la culpa la tenía su Hyung por ser imprudente, aunque también parte de culpa tenía en todo esto pues lo más seguro es que se haya quedado mirando los movimientos que hacia este, algo que de seguro lo notó el mayor


Luego de lo ocurrido los presentes en aquella casa se dispusieron a comer lo preparado, después de todo Yesung no era descortés con el presidente, aunque no esperaba que este sí lo fuera, pues dijo que no podía quedarse más tiempo y así se fue, no obstante antes irse notó que Ryeowook se encontraba ahí, pero no dijo más, solo se fue.


Gracias a su salido el ambiente en el lugar dejó de ser tensó, por lo poco que sabía Ryeowook su jefe detestaba a su hyung aunque no sabía la verdadera razón cada vez que esos dos se juntaban nada buena podía salir, pues ese desprecio era mutuo, por eso refería alejarse de esos dos, a lo que conlleva el hecho de no preguntarle a su hyung del porque esa antipatía de parte de ambos, algo debió haber paso para ser así, pues sabía por boca de los demás empleados en la empresa que esos dos no siempre fueron así, pero que con el tiempo se convirtieron en lo que ahora son, ni modo…


Luego de aquello Yesung subió junto con Ryeowook, claro con comida para la niña, encontrándola con mejor aspecto, aunque eso no le quitaba que emitía un aura de enfermo.


- ¿Ryeowook-shi? –Dijo ella al verlo recién en su casa-

- Ah, es verdad vino a ver como estabas –Dijo Yesung acercándose a ella y con el dorso de su mano medirle la temperatura- Bajo la fiebre, pero aún tienes el rostro rojo… -Miró en la mesa de noche del al lado- Ah, tomaste la medicina –“Por lo menos algo bueno hizo ese vejete”-

- El abuelo me dijo que lo hiciera y a cambio me llevaría un día al zoológico

- ¿¡Te soborno!?

- No es soborno, solo llamó mi atención materialistamente

- Ah, p-pero no veo mal que paseé con el presidente Kim ¿no?... Después de todo es su abuelo –Intervino Ryeowook-

- Puede… pero de esa manera no… Y tú come sino no mejorarás… -Dejó la bandeja en su regazo-

- Ah, yo iré alimentar a Kkoming –Dijo para luego bajar a la cocina-

- Creo que yo también iré –Dijo Yesung-


Se dispuso a irse, mas un agarre en su suéter lo detuvo, girando inmediatamente a ver a la pequeña, quien tenía el rostro suplicante ante algo.


- Él… ¿Vendrá a verme? –Dijo con decepción anticipada de no ser así-


Yesung le quedó mirando sin darle una respuesta, en realidad al igual que ella lo quería a su lado, pero si no era conveniente para él, no podía forzarlo, aunque pensando en que esa reunión ya terminó pues concluyó eso al tener a Ryeowook presente, lo más probable que él este libre, sin embargo pensando en todas esas veces que le pidió reunirse lo más probable es que tenga trabajo acumulado por su causa…


- Lo llamaré –Le sonrió para que dejará ese aura triste- No te preocupes

- Entonces… No soy su prioridad

- Lo dudó, lo más seguro es que en estos momentos esté haciendo lo posible para venir a verte… Aunque no lo parezca, Kyuhyun es muy obstinado en lo que se propone, por eso te repito… no te preocupes


No sabía si estaba bien mentirle así a una niña, pero por lo menos en este momento dejará de inquietarse, pues lo más importante es que se mejore.


--♥--


“No, definitivamente ¡No! Este no ha sido tu mejor día, Kyuhyun” pensaba para sí, mientras que sus brazos estirados encima del escritorio sostenían su cabeza, a simple vista se notaba el cansancio que de su cuerpo emanaba.

Luego de tener una serie de trabajos pendientes que hacer terminando incomprensiblemente con todos, ahora se encontraba muriendo en lo que parecía ser un escritorio pues fácilmente se podía confundir con una mesa llena de papeles parecidos a unos rascacielos.


“A todo esto… No sé ni qué hora es” pensó recobrando algo de vitalidad para continuar, solo para irse a su casa a descansar, metió su mano al bolsillo buscando su celular y ahora que lo pensaba era extraño que ese conejo no le haya timbrado en todo el transcurso del día “Tal vez se cansó de ser tan entrometido” una buena causa y en cierto punto beneficiosa para su persona; se llevó una gran sorpresa al no encontrarlo, por lo que miró su escritorio, pensando inmediatamente que lo más seguro es que este revuelto entre tanto papel, y sin pensarlo más dio caso perdido buscarlo “Tal vez me compré otro” Sí, un pensamiento inmaduro pero justificable ante el agotamiento que tenía.


Y así se dispuso a marcharse, tomó sus pertenencias y demás, salió de su oficina, suspirando en el transcurso pues así como al principio del día, era un hecho que para tener que irse tendría que pasar por pasillos y encontrarse con los demás empleados y que estos le digan “Hasta luego, señor” y sinceramente no tenía humor para fingir una sonrisa, hasta el rostro le dolía.

- D-disculpe, señor –Esa voz detuvo la marcha de Kyuhyun-

- ¿Qué? –Dijo sin muchas ganas de saber qué era lo que quería su secretaria-

- ¿Y-ya se va?

- Sí, ¿No es obvio? –“Definitivamente contrataré a alguien más”- ¿Por qué, hay algún asunto pendiente? Si es así, mañana lo veré porque no tengo ganas para nada

- Ah no es eso, s-señor –Denotando nerviosismo… Y ¿quién no? Es más todos le temían a Kyuhyun- E-es solo que en la mañana y hasta hace poco lo llamaban de su celular

- ¿Llamar?... ¿Cómo sabes eso?

- Usted dejó su celular a mi cuidado ¿No lo recuerda? Me dijo que lo tuviera para que no lo interrumpieran en la reunión…

- Eso fue hace mucho… ¿por qué no me lo devolvió?

- Es porque después de eso no quiso que nadie lo interrumpiera… -Se lo devuelve- Por eso temía por mi vida…

- No eres tan tonta después de todo –Sí, Kyuhyun sabía que podía pasar eso-

- Ah y también alguien llamó, me pidió que le dejara un recado… -Decía mientras Kyuhyun revisaba las llamadas perdidas que tenía-

- ¿Q-qué dijo? –Ya sospechaba quien podría ser-

- Dijo que alguien llamada Hiyori quería verlo al parecer esta se encuentra enferma… Ah no solo llamó una vez sino cuatro –Se le dibujó una sonrisa a ella- Ah~ Que voz tiene, es como un sueño –Se le iluminaron los ojos-

- ¡Eh! Deja de fantasear –Fijo sus ojos en ella-

- Jefe ¿Es un amigo suyo? –Asiente algo perturbado por el rostro estúpido que traía ella- Ah~ jefe ¿es soltero?

- ¡Hey! ¿Para qué quieres saber eso? –“¿Cómo si fuera a decirte?”-

- Me gustaría conocerlo, debe ser igual de atractivo que su voz, Kyaa~ -Ignorando completamente a Kyuhyun-

- ¡No te ilusiones! Por el hecho de que sea viudo no significa que esté buscando pareja ahora

- ¿En serio? Eso quiere decir que está disponible, Kyaa~

- ¡¿Eres tonta o qué?! ¿Qué parte de “No busca pareja por ahora” no entendiste?

- Ah, jefe diciendo esas cosas hasta parece que no quiere que nadie se le acerque… Eso es ser celoso

- ¡Deja de hablar estupideces! –Se sonrojó por lo que agacho la mirada para que no lo notará- Solo digo la verdad… Y quita esa cara de trastornada que tienes, me voy.

- Yo solo decía –Si bien tenía su lado amable y conservador a veces se le olvidaba esa faceta solo para fastidiar algo a su jefe ¿Por algo no fue elegida por su padre para controlar a su hijo?- Ahh todo lo que tengo que hacer solo por dinero… -Dijo cuándo el menor no se había marchado- Aunque no puedo quejarme, ver esa expresión es tan satisfactorio como la voz de ese hombre… -Sonrió al recordar la escena de celos que le armaba su jefe- Se nota que hay algo ahí y no es precisamente “Amistad”, me lo dice mi sentido femenino


Mientras tanto a las afueras del edificio


- ¡¿Está loca?! ¡Vieja desesperada! –Por el hecho de ser mayor que él- ¿Cree que dejaré que eso pasé? ¡Ni muerto!... ¡Yesung es mío! –Detuvo su marcha al tomar en cuenta lo dicho-


“B-bueno… No de esa forma, sino que… es solo… alguien que quiero conservar en mi vida…”


Anteriormente Kyuhyun ha conocido a muchas personas de las cuales les prometieron ser amigos pero solo con el tiempo se notaron los verdaderos “amigos” que este tiene, claro el resultado se puede decir solo con los dedos de una mano, y cuando dejó a su Hyung, muy aparte de las razones que haya tenido para hacerlo, sintió un vacío no solo en su pecho sino en su ser, pues a él lo considera una persona que le dio su apoyo cuando más lo necesitaba, alguien que le demostró que en la vida existen personas amables, debe ser por eso que el primer amor de Kyuhyun fue precisamente su Hyung, y aunque haya tenido otras relaciones y salido con personas diferentes, en el tiempo que estuvo lejos de él, aun lo sigue queriendo como siempre y eso no ha cambiado solo que ahora que está acerca a él lo ha estado ocultando por obvias razones. Es por eso que no es adecuado decirle sus sentimientos pues eso podría traer consigo un rechazo del cual no está preparado para recibir, aun si es como un simple amigo quiere a Yesung a su lado y conservarlo siempre

“… Aun si es como amigos…”



Cerró los ojos con fuerza y movió su cabeza intentando infantilmente quitar esas ideas de su mente, y aunque lo logrará ¿Podrá hacerlo si vuelven a parecer? Bueno hacer eso cada que tiene ese tipo de pensamientos no era adecuado, y más si se trataba de él.


Sin darle más vueltas al asunto, subió a su auto, si antes el cansancio salía de sus poros ahora no… más bien la ansiedad se apoderaba de él



“Es solo por ella, Hiyori ¿Entiendes? ¡Corazón Babo!... Deja de latir así, sino en verdad pensaré que… hyung es la única razón por la que lates así”



Continuará~

miércoles, enero 08, 2014

Por un minuto de ti [YeHyun] Cap. 2



Y soy yo de nuevo trayendoles una nueva actualización de este nuevo fic y quiero dedicar el capitulo a Katt por darle mucho amor a mis escritos, de verda lo agradezco ;-;
Sin más palabreria les dejo el cap.

Disfrutenlo~


Acto 2

- ¡Appa! Te dejo unos minutos a solas con Oppa para que te confesarás de una buena vez y vaya lo he hecho todo el día y lo terminas arruinando ¡Eres un cobarde!

- ¡Lo intente! Pero es difícil… Y no hables así, jovencita

- ¡Aish! Solo espero que no sea tarde… De verdad quiero que se quede a mi lado…

- “Nuestro” lado… -suspiro en signo de frustración- Sabes, aun no sé cómo te diste cuenta

- Por mi sexto sentido femenino, papá

- Ahora hablas como una altanera… Hace poco nada más andabas en pañales…

- ¡Crecí, papá! Y deja de llamarme niña que tengo 10 años…

- Eres muy crecida para tú edad

- Lo sé –Sonrisa malévola- … Oye, mañana es feriado en mi escuela, por eso pensé si podías llamar a Oppa para que pase un rato conmigo -Sonrojada-

- No lo sé, no creo que tenga tiempo de cuidar a una mocosa

- ¡Hey!

- Entiende, los adultos mañana sí vamos a trabajar y tal vez este muy ocupado

- Oh, entiendo –Cara triste-

- Pero haré lo que pueda para que esté con nosotros ¿Te parece?

- Es genial…

- Ahora sí me iré a dormir -bostezo- Ah, sí te vas a quedar despierta, que no sea hasta las 12, sino te enfermarás…

- Jajaja patrañas, aunque no lo creas soy muy resistente

- Ja, Ja, Ja eso veremos…

--♥--

- Abre la boca –Ella lo hizo e inmediatamente le coloco aquel aparato- Sabes a veces eres muy altanera, soberbia y arrogante…

- ¿Eso no es lo mismo?

- Sí, son sinónimos pero me gusta recalcártelo –Se fue a preparar un café- ¡Dices que eres resistente! Ja, niña soy tu padre y sé que eres fácil de contagiar gripe, por eso te advertí…

- L-lo siento –Su rostro se encontraba sonrojado pero no solo era por admitir que su padre tenía razón sino también por la fiebre que tenía-

- Déjame ver –Se acercó a ella y le quitó el termómetro que hace poco tenía en la boca- … 38º -suspiro-

La pequeña fijo sus grandes ojos en el rostro de su padre, quién ahora se alejaba de ella para dejar la habitación, la niña respiraba agitadamente y tenía unos dolores musculares que no le permitían moverse “¡Cuanto odio enfermarme!” renegaba para sus adentros, pues ni fuerza para gritar tenía “Tal vez fue mala idea ver Doramas hasta tarde… Aish pero estaba interesantísimo”

Se sentía tan mal, que parecía que las sábanas que la cubrían pesaban y que la habitación en la que estaba era muy pequeña, aunque en realidad era la más amplia de la casa, claro contando también con la de su padre.

Como necesita tanto de alguien que la cuide, pero no de su padre, sino de alguien más… “Te necesito de Oppa” –Se acurruco entre las sábanas-

--♥--

- ¿Qué? ¿No vendrás? Pero ¿Por qué?

- Mi hija se enfermó y no pudo dejarla sola –Se sobó las cienes-
- ¿Qué? ¿Hiyori, está bien?

- Es un resfriado, pero por lo mismo me preocupa… A ella le va muy mal con esas cosas ¿Podrías hacerme ese favor?

- O-ok, pero sabes que el presidente quería que tú vayas a esa reunión… Y no creo que me deje ir por ti sin antes armar un escandalo

- Lo sé, ya hable con él, por eso no te preocupes, aunque renegó un poco -Bastante- termino aceptando pues falta poco para esa reunión y no le convenía prolongarla más…

- Entonces está bien, yo me encargaré de todo, pero si necesitas algo, no dudes en llamarme, ¡sin dudarlo te ayudaré!

- No te preocupes, Ryeowook, me has ayudado demasiado, de todos modos gracias… Adiós
- ¡E-espera! Avísame cuando se mejoré

- Lo haré –Colgó el telefono-

“¿Estaría bien si… lo llamará? –Cogió el mango del telefono- pero debe estar ocupado ¿cierto? –Colocó el telefono en su lugar-… Aunque es solo para avisarle ¿no? No hay necesidad de que venga… pero ¿Y si mi llamada lo perturba? –Alejo su mano del telefono- … ¡Ah basta solo es una llamada!”

Yesung intentó marcar su número, pero este no entraba la llamada, es más de inmediato lo llevaba al buzón de voz “Lo sabía una pérdida de tiempo”

- ¿Hola?

- Ah, Kyu -Nervioso- que bien que…

- Lo lamento, pero el señor Cho en este momento está en una reunión importante y al parecer tardará mucho, soy su secretaria y accidentalmente dejó su celular en su escritorio…

“¡Ah, demonios es verdad! Kyuhyun es el representante de la empresa Cho –Y también heredero- y se suponía que también iba a estar en esa reunión representando a la empresa con la que iban a hacer una alianza -suspiro- ¿Cómo pude olvidarlo?”

- Disculpe… ¿?

- Oh, lo lamento -Nervioso- le podría mandar un mensaje de mi parte… Le podría decir que en cuanto pueda me llame… -“¿Es conveniente decir la verdadera causa?”- y también que Hiyori está enferma y que si puede venir a verla… -Al parecer sí-

- Lo haré perdón, pero ¿De parte de?

- Un amigo solo eso, él entenderá…

- Ok señor -Colgó-

Yesung colocó el telefono en su lugar con desanimo “Sabía que era mala idea… Él tiene su propia vida y yo la mía, no hay razón por la cual querer obligarlo a acoplarse a la mía… No sería justo ¿cierto?”

“Tal vez le estoy causando muchos problemas innecesarios”


Este se dirigió hasta la habitación de su hija, llevando en la mano un recipiente con agua y en ella una tela mojada, se sentó a la orilla de la cama y retiró unos cuantos mechones de su frente dejando está al descubierto, posó el dorso de su mano en su frente descubierto notando que está aún tenía fiebre, tal vez más que antes; exprimió la tela mojada sacándole el exceso de agua y colocándoselo en la frente, para así refrescarla un poco, ante aquel acto la niña abrió sus grandes ojos –Heredados por su padre- notándose lo débil y enferma que estaba.

- Oppa…

- Appa, querrás decir

- No –negó con la cabeza- Oppa… ¿vendrá? –Dijo con la fuerza que aún tenía-

Él solo le quedo mirando ¿Cómo decirle a una niña la verdad sin entristecerla?... Ser padre es muy difícil


- … No, hoy no vendrá… Él está muy ocupado y para un adulto su prioridad es su trabajo

- Tú también eres adulto y tienes trabajo… Y aun así estas aquí

- Es porque mi prioridad eres tú –Le acaricia unos mechones-

- E-entonces… ¿No soy una prioridad para Oppa?

-Suspiró- … Aun eres muy pequeña para entenderlo… Sabes, si no le temieras a las inyecciones hace rato estarías mejor

- ¡No!, inyecciones no, no me gustan

- Lo sé… -“A mí tampoco me gustan”- … por eso debes tomar pastillas o seguirás moribunda

- Lo haré, pero… inyecciones no… no –Sin evitarlo se quedó profundamente dormida-


Y sin poder evitarlo él también cayó rendido, tal vez una siesta le haga bien a ambos, después de todo uno se encuentra enfermo y el otro cansado mentalmente.


--♥--


- Buenos días, joven -reverencia-

- Buenos días –Camina con rapidez-


“Oh, genial otra vez la ola de los saludos matinales… A veces es agobiante ser el hijo del presidente, pero más aún que todos lo sepan”


- Buenos días, Director -Reverencia-

- Buenos días, con su permiso –Camina con más aceleración-

- ¿Con prisa joven?


Ni tiempo de contestar tuvo, y no es que fuera descortés sino que las puertas del ascensor se cerraron antes de poder hacerlo.


“Bueno por lo menos, ahora no habrá más incomodos saludos -Suspiró- … Es un milagro que el ascensor no esté lleno, casi siempre no alcanzo a entrar a la primera, debe ser porque llegue más temprano de lo usual, aunque no se lo atribuyo a mi puntualidad sino a que en toda la noche no pude dormir adecuadamente… Y es que aquel tema aun ronda por mi mente, eso sumado a lo que Yesung quería decirme, me tuvieron intranquilo -Suspiró- Solo no quiero pensar de más”


- Oh, jefe llego…

- ¿Temprano? Sí lo sé –Camino de frente a su oficina-

- Jefe, no sé olvide que a las 8 am es la reunión con los representantes de la empresa Kim

- ¿Ah? –Sorprendido- ¿Es hoy?


“¿Hoy lo… veré? ¡No, aun no estoy listo mentalmente! No creo poder verlo a la cara”


- ¿No me diga que lo olvidó? Jefe ¿y las propuestas? ¿No las tiene?

- No seas tonta, mujer… Soy Cho Kyuhyun y me prepare para esto anticipadamente… Claro que tengo las propuestas, como lo iba a olvidar

- ¿Entonces?

- Es solo que olvide la fecha, es todo –Sin la secretaria salió de la oficina-


“Algo me decía que hoy no era mi día ¿Cómo podré verlo después de que casi ayer…-Recuerda que le tocó la mano, algo que él nunca hacia hasta ahora-? …. –Pensando, pensado- Esperen ayer no pasó nada de lo que pueda arrepentirme, es más él iba a decirme algo, pero luego… pareció no querer contarme”


“Posiblemente quiso disculparse porque siempre he estado ahí cuando se trata de Hiyori –Agarrándome la mano- o tal vez era para decirme que había encontrado una madre para Hiyori –Agarrándome la mano- o quizá era para decirme que es un alienígena (demasiados videojuegos causa falta de raciocinio) de otro mundo - Agarrándome la mano-… O a lo mejor… -Nerviosismo- quién sabe… tal vez quiso decirme que… ¿Le gusto?”


Estrelló su frente contra su escritorio, haciendo un estruendoso ruido que se escuchó en todo el edificio de 30 pisos, debido a esto de inmediato su secretaria se dirigió a su oficina para cerciorarse de que no ocurriese nada malo.


- ¡Señor ¿Se encuentra bien?! –Desde esa misma posición asintió haciendo un ruido en señal de un “Sí”- … ¿Quiere que le traiga algo? -Negó- … Er... etto cualquier cosa avise por favor  -Kyuhyun hizo un ademan en señal de que ya podía retirarse-


Cruzó sus brazos encima de su escritorio y reposando su mentón en medio de estas, mientras sus ojos miraban lo espacioso de su oficina perdiéndose en algún punto de vista cualquiera; inquietud era lo que sentía en ese momento, no podía pensar las cosas claramente y todo por saber que dentro de unos minutos más lo volverá a verlo… No, no podía, no se encontraba psicológicamente preparado para eso, pero tenía que hacerlo quiera o no, pues para la empresa ese alianza era importante y no podía fallarles; sería fácil decir que no se encontraba para nada bien e inventar una sarta de mentiras con tal de esquivar aquel encuentro, pero eso sería ser inmaduro y Kyuhyun ya no está para hacer esas cosas infantiles, antes se lo hubieran hecho pasar por alto pero ahora era completamente diferente, pues él no solo es el hijo del presidente de la empresa –que de por sí eso trae consigo la mirada atenta de los demás- Sino que también gracias a sus habilidades innatas a podía llegar hasta donde está, encabezando uno de los cargos más altos y por ende importante…


- J-jefe –Se asomó una temerosa secretaria a la puerta pues en varias oportunidades había sido atacada por el genio de su jefe- … Acaba de llegar la mayoría de los futuros socios de la empresa, es hora de que usted también vaya.

- Ya veo… –Se paró, sacó de uno de los cajos de su escritorio una carpeta y con ella salió-


Kyuhyun era muy bueno para no dejar notar sus verdaderas emociones a las personas que le rodean, bastaba con poner una cara sonriente como si nada hubiera pasado y el resto sería fácil, pero esta vez le costaba trabajo ponerse esa mascara, pues siempre que estaba cerca de su Hyung esa mascara se rompía fácilmente, costándole trabajo volver a ponérsela… Así era siempre es por eso que con su Hyung solo podía actuar normal sin inhibiciones, podía ser Kyuhyun.
Al entrar a la sala de reuniones exclusiva de la empresa, se sentó en el lugar respectivo, a unos cuantos asientos más se encontraba los demás accionistas de su empresa y junto con ellos su padre, quien por cierto no había saludado y pues eso era ya casi común entre ellos, ya que su relación es algo fría si se puede decir, aunque eso no le preocupa a Kyuhyun, “Con tal de que este lejos de mi vida, todo está bien”

Con el pasar de los segundos fueron llegando la totalidad de empresarios ubicándose en sus asientos respectivos, pronto comenzó la charla sobre la futura asociación, pero Kyuhyun no pudo notar ni una pista de su Hyung “¿Acaso aun no ya llegado?” algo que le extraño demasiado, normalmente él no era de las personas que dejan su trabajo aun si cogen un resfriado, es más con todo y resfriado iría a trabajar, eso lo saber porque una vez lo vivió “Tonto” pensó luego de recordar aquello, con mucho cuidado –No quería ser obvio- busco con la mirada a ese tonto Hyung suyo mas no lo halló, aunque algo llamó su atención, un joven –No sabe con precisión mayor o menor que él, aunque por su apariencia pareciera menor- algo conocido a su parecer, aunque no recuerda en donde –Haciendo memoria-

“¿Ese no es el chico con el que andaba Yesung aquella vez? –Pensó no muy seguro, pues no le presto demasiada atención- … ¿Qué hace aquí?”


--♥--


“Uff… Eso fue agotador –Zombie andante- Tener casi 4 horas de reunión es demasiado para mí –Dirigiéndose a su oficina-”

- Disculpe ¿Es usted Cho Kyuhyun, el hijo del presidente Cho? –Dijo una voz de un anciano (Adulto pero para él es anciano) detrás suyo-

- Er… Sí, soy yo… ¿Y usted es? -Ignorancia-

- Soy el presidente Kim –“Ya veo… por eso mantenía su mirada sobre mí en toda la reunión”- y la persona a mi costado es Kim Ryeowook quien me acompaño hoy –“¿Qué? Pero no se suponía que iba a ser Hyung”- veo que es verdad lo que dicen de usted
- ¿Ah? ¿A qué se refiere?

- Hoy pude comprobar que el futuro de esta empresa y también de la asociación nuestra caerá en manos correctas -Sonrió-

- Muchas gracias por el cumplido

- Más que un cumplido es un reconocimiento por tu evidente capacidad

- Le agradezco su tiempo, pero por ahora tengo que ser grosero con usted, tengo algunos asuntos que debo atender  –“Si claro, lo único que quiero es irme”-

- Oh, entonces nuestra plática será para una oportunidad más prudente, cuente con que volveremos a vernos

- Eso esperó –Hizo una reverencia para luego marcharse-


Al estar a una distancia prudente bufó, ciertamente aquellos halagos no le agradaron, cualquier persona en diría que ese señor actuaba lo más caballeroso posible, pero eso no engañaba a Kyuhyun sabía perfectamente que en la sociedad empresarial hay muchos buitres a espera de una presa para abalanzársele encima cuando este esté desprevenido, ser hijo del Cho Younghwan, empresario con éxito en todo Corea, no era fácil

Una abrumadora ola de calor le arraso su cuerpo, ¿Qué era eso? ¿Acaso un próximo resfriado? ¿Un presentimiento?... “¡Qué demonios…!” pronto su cuerpo, en especial su cara, se calentó tanto que el mismo podía sentir una aura caliente a su alrededor, sin más se dirigió a los baños para refrescarse un poco.


- ¿Qué pasa? –Se interrogo a sí mismo mirándose gran espejo frente suyo- … Tal vez un maldito resfriado quiere atacarme –No le encontraba lógica a esa reacción involuntaria de su cuerpo-

Volvió a echarse agua al rostro, en cierta forma eso lo sacaba del desgano que hace instantes tenía debido a estar en un lugar cerrado con muchas personas que lo único que hacían eran verlo como si este tuviera en su cabeza un letrero parpadeante diciendo “Aquí estoy”. Pasó una mano por su rostro en forma de resignación ¿a qué? Ni él mismo sabe…


- Cho Kyuhyun ¿Verdad? –“Ah, demonios otro más”-


Giró 180º para quedar cara a cara con quien le entablaba una conversación de la cual automáticamente pensó en deshacer cuanto antes


- Sí, soy yo –Cuando divisó mejor el rostro de la persona frente suya notó que lo había visto antes- … ¿Tú no acompañabas al señor Kim?... –“¿Cómo dijo que se llamaba?”-

- Sí, soy yo, que casualidad poder verte aquí, es un gusto por fin verte en persona


Ok, admitía que era alguien importante, pero ¿Qué es esto? Ahora era alguien popular… “Qué vida llevas Kyuhyun”


- Er… Gracias… ¿? Pero me intriga algo, ¿En persona?

- Lo lamento, no me he dejado entender, me han hablado mucho de ti, pero en especial una persona –“¿Quién? un pervertido debe de ser ¿no?”- la cual quiero mucho, es un hecho que lo conoces…

- ¿Así? –Sin tomarle importancia- … que bien, perdón pero debo irme


Estaba por marcharse y dejar la conversación algo incomoda debe decir, aunque de esa boca salió algo interesante


- ¿Conoces a Jongwoon? –Aquello dicho lo dejó helado, ¿Estaba hablando de su Hyung?, inmediatamente giro a verlo- … Por lo que veo así es -Sonrió-


¿Q-qué es lo que está sucediendo? ¿Es amigo de Yesung?... al parecer así es. “Bueno no me importa si es amigo de pepito, Juana o quien sea, no tengo ni tiempo ni nada que ver con él”


- Bueno que bien, pero como dije antes tengo prisa –Intento nuevamente irse pero volvió a hablar-

- Sabes esta situación es algo incomoda, pues no creí encontrarme contigo tan pronto, pero ya que estás aquí, veo conveniente decirte lo que hace mucho pienso de ti…


“Esperen que le sucede a su tono de voz, hace unos minutos en el encuentro con ese anciano parecía tan inofensivo casi débil, pero ahora es como si de su cuerpo emanará una evidente rabia hacia ¿mí?... ¿Qué le sucede?”



- ¡Aléjate de Jongwoon! –Soltó de una-


Continuará~